Una de las piezas más interesantes del ajuar del Señor del Gran Poder son las potencias de filigrana que, a mediados del siglo XIX (1861), donaron a la venerada Imagen José Rafael de Góngora, quien fuera mayordomo de la corporación de San Lorenzo en aquel tiempo, y su madre.
Al estar la técnica de la filigrana está prácticamente desaparecida, se trata de un proceso restaurador que requiere de una gran complejidad, así como un conocimiento exhaustivo de dichas técnicas. De tal modo que, durante los próximos meses, las piezas serán recuperadas por un maestro cordobés que, una vez finalice el proceso, fuentes de la hermandad de la Madrugá aseguran que "serán sin duda una de las principales novedades patrimoniales del próximo curso".
Se trata del juego de potencias más antiguo que posee la hermandad, así como de una pieza de un enorme valor que, tras décadas sin ser lucida, volverán a resplandecer sobre la cabeza del Señor de los Señores.
Blas Jesús Muñoz