Raquel Medina. Las hermandades sevillanas no dejan de manifestarse a favor de la vida. La última en hacerlo ha sido la Hermandad del Sol, que en sus medios de comunicación ha hecho público un manifiesto en contra del aborto, pero como novedad ha incluido una adhesión para todos aquellas personas que así lo deseen. Es decir, pretende que este manifiesto, esté avalado con la firma de hermanos, cofrades o ciudadanos de a pie. Puedes adherirte a través de ESTE ENLACE.
La Hermandad del Sol se une así, a las del barrio de Triana y Los Remedios, Las Penas de San Vicente, San Isidoro o la Vera Cruz.
Unos de los puntos del manifiesto afirma que «desde la hermandad sacramental de Nuestra Señora del Sol se seguirán promoviendo acciones tendentes a la orientación y ayuda a familias que, por motivos de extrema necesidad, puedan sentirse tentadas a cometer este latrocinio hacia la vida del más débil».
Este es el manifiesto íntegro:
La Junta de Gobierno, reunida en Cabildo de Oficiales el pasado 23 de octubre, acordó por unanimidad la redacción, publicación y difusión del siguiente manifiesto:
La Fervorosa, Mariana y Franciscana Hermandad del Santísimo Sacramento y Cofradía de Nazarenos del Triunfo de la Santa Cruz, Santo Cristo Varón de Dolores de la Divina Misericordia, Nuestra Señora del Sol, San Juan Evangelista y Santa María Magdalena, en tanto que se encuentra constituida como una Asociación Pública de Fieles que sigue la Doctrina de la Iglesia Católica, Apostólica y Romana; y como preclara auspiciadora y custodia del Culto y Devoción a la Santísima Virgen, excelsamente Impregnada de la Gracia de Dios y Expectante ante el alumbramiento del Sol de Justicia, no puede permanecer impasible ante la silenciosa barbarie que constituye la práctica del Aborto; es por todo ello por lo que MANIFIESTA:
PRIMERO.- Que el derecho a la vida es aquel derecho natural, originario y primario que tiene todo ser humano desde su etapa inicial, embrionaria y fetal, hasta su muerte; constituyéndose la propia vida como un derecho fundamental, universal e inviolable y como sustentáculo del que penden el resto de derechos.
SEGUNDO.- Que ninguna consideración legal, cultural, política, científica o económica puede autorizar a disponer de esa vida y mucho menos a eliminarla; no debiendo disposición alguna legitimar un atentado contra la vida humana.
TERCERO.- Que desde el momento de la concepción estamos en presencia de una vida humana diferente a la de la madre que la alberga y del padre que contribuyó a engendrarla. Esta realidad es indiscutible. Por lo que, por la aplicación del principio de prudencia, bastaría incluso con que cupiese la menor duda al respecto para que, por precaución, se protegiera esa vida humana. Por lo tanto, es a aquellos que defienden que esa vida humana puede ser eliminada a voluntad a los que corresponde la carga de la prueba: si no pueden probar, más allá de cualquier duda razonable, que no estamos tratando con una vida humana diferente de la madre, tampoco pueden defender la legitimidad de su eliminación.
CUARTO.- Que nadie tiene derecho a disponer de una vida humana, y que el fruto de la concepción no puede constituirse como una parte del cuerpo de la mujer, sino una vida humana diferente, y, por tanto, no se le puede reconocer a la mujer el derecho a abortar.
QUINTO.- Que desde la Hermandad Sacramental de Nuestra Señora del Sol se seguirán promoviendo acciones tendentes a la orientación y ayuda a familias que, por motivos de extrema necesidad, puedan sentirse tentadas de cometer este latrocinio hacia la vida del más débil; así como labores formativas y de apostolado para sus hermanos y feligreses.
SEXTO.- Que nos encomendamos al Santo Cristo Varón de Dolores de la Divina Misericordia para que ilumine a los participantes en el Sínodo sobre la Familia que actualmente se celebra en la Santa Sede, para que en sus diversos ministerios puedan dar respuesta a las tribulaciones de la ciudadanía en relación a la Defensa del Derecho a la Vida, desde su misma concepción y hasta el ascenso a la Casa del Padre.
En Sevilla, a 27 de Octubre, en el año del Señor de 2014.
Paz y Bien.