Julio el Tabernero. Niño, siéntate bien cerquita de la barra y no te despegues de la barra que hoy voy a invitar a todos los parroquianos de la taberna a una o dos rondas por las noticias de la apertura de la segunda puerta de la Catedral.
Y es que ya está bien después de tantas idas y venidas, de tanto ICOMOS, de tanta Junta de Andalucía y de tanto hijo de arquitecto que por ahí andaban empestiñados en dar morcilla todo lo posible y un poquito más. Al final parece que el sentido común por una vez se impone.
Justo ahora que han cuadrado todos los horarios ha sonado el campanazo final con la celosía. ¿O no será el último? Bueno, el tiempo dirá. Y sí, ya sé que algunos días no han cuadrado del todo hasta que la Agrupación se ha visto obligada a apuntalar el Miércoles Santo a martillazos.
Yo te digo una cosa, niño. Que si algo bueno puede tener esta carrera oficial es que a muchas hermandades las va a poner en su lugar. Tú ya me entiendes porque eres bien listo. Vamos a ver cuánto tardan en cambio algunos de los afectados en pillarlo.
