La pro-hermandad ha quedado en manos de miembros del consejo parroquial que quieren seguir sacando a la Virgen el Sábado de Pasión.
Uno de los proyectos de cofradía con más visos de poder convertirse en los próximos años en una hermandad como tal ha quedado frustrado. La pro-hermandad de Nuestra Señora de los Desamparados, ubicada en la parroquia de Santa María Goretti, en la barriada de Los Corazones, atraviesa por momentos de incertidumbre después de que el párroco de este templo, regentado por sacerdotes de la Congregación Pasionista, haya destituido a la directiva de este germen de cofradía que inició su andadura en 2007 y que sale en procesión desde 2008. El grupo ha quedado en manos de seis miembros del consejo parroquial que han realizado varias acciones de caridad en las últimas semanas y que quieren seguir sacando a la Virgen que tallara el malagueño Juan Vega el Sábado de Pasión, víspera del Domingo de Ramos.
El párroco del templo, Luis Antonio Marco, explicó a este periódico que tomó la decisión de prescindir en bloque de la directiva de esta asociación cofrade «por falta de integración con la parroquia y entre la propia directiva». «Es un grupo parroquial más y se ha buscado lo mejor para la cofradía y para las personas. Había falta de diálogo», señaló este sacerdote para justificar su intervención, que no ha sido bien acogida en los ámbitos cofrades.
Por sorpresa
Fuentes de la hasta ahora directiva del grupo de los Desamparados, que ha llegado a poner en la calle un cortejo procesional de 170 nazarenos según recordaron, explicaron que la decisión del párroco, que se produjo el pasado mes de mayo pero que no ha trascendido hasta ahora, les cogió totalmente por sorpresa ya que los responsables de la pro-hermandad tenían previsto convocar elecciones en los meses siguientes, aunque tocaban en febrero del año que viene, para dar margen suficiente a la preparación de la salida procesional de 2014. «Nos reunió y nos dijo que estábamos todos destituidos de nuestros cargos», explicaron las fuentes, que apuntaron que el propio cura promulgó un reglamento interno para el funcionamiento del grupo cofrade que él no ha cumplido finalmente.
Por su parte, el párroco manifestó que la decisión no se ha tomado «en contra de nadie» y que el grupo cofrade sigue vivo y abierto a todo el que quiera participar en él. Al frente del mismo ha quedado Antonio Carvajal, un miembro del consejo parroquial encargado de los temas de liturgia que reconoció a este periódico que no es cofrade pero que ha aceptado el encargo del párroco con interés. Carvajal expuso que, al tratarse de un grupo parroquial, es el cura encargado del templo el que puede nombrar «a dedo» a sus responsables, y apuntó que también podría haberse optado por la extinción del colectivo pero se ha decidido mantenerlo y seguir sacando a la Virgen de los Desamparados en procesión tanto en las vísperas de la Semana Santa como en un rosario vespertino en octubre.
El nuevo trono, en duda
Este año, este grupo cofrade tenía previsto estrenar un nuevo trono con palio, cedido por las Cofradías Fusionadas, que no pudo lucir al suspenderse la procesión por el riesgo de lluvias. Cuestionado sobre si se seguirán empleando estas andas, Carvajal apuntó que dependerá del número de personas que se inscriban para la procesión, y confesó: «Menos mal que el trono no llegó a salir por la lluvia, porque personas que lo vieron dijeron que se habría desarmado en la calle».
Fuente Cofrades Málaga