La actual junta de gobierno de la hermandad de los Gitanos aprobó el pasado día 28 de enero, las cuentas del ejercicio contable 2013, arrojando un superavit cercano a los nueve mil euros y con unas cuentas de palabras de su propio hermano mayor, Pepe Moreno, "saneadas". A través de la web de la candidatura de Pepe Moreno se ha publicado un extenso comunicado indicando todos los pormenores de este cabildo, el cual fue aprobado por mayoría absoluta, pese a las manifestaciones y afirmaciones que han desvirtuado notablemente la gestión de la corporación de la Madrugá.
Estas opiniones han creado una crispación entre los hermanos motivadas por intentar trasladar una gestión económica que nada se ajusta a la realidad presente, no respetando la decisión de este cabildo soberano.
En dicho comunicado, se afirma que todos los pagos están efectuados, teniendo en caja un saldo de más de seis mil euros, apostillando que el único pago pendiente que queda es el del columbario que realizó la hermandad y que será satisfecho en 2014, por las cuotas voluntarias de los hermanos que han adquirido en propiedad uno de los habitáculos, recaudando más de lo que se debe de pagar.
Se maneja la cifra entorno a los nueve mil euros de superavit sumando el saldo en caja y el remanente económico restante, tras el paso, de los columbarios, siendo este una fuente de ingresos extraordinarios para la corporación.
El comunicado también aborda la aportación ordinaria que tiene que hacer el hermano, explicando muy detalladamente, la situación de esta y remarcando las formas de pagos que hay y los impagados reales que existen en la actualidad, afirmando Pepe Moreno, que "los hermanos de los Gitanos están muy comprometidos con la hermandad", prueba de ello es que en las cuentas del año 2013 se ha superado en un 2,10% la cuantía presupuestada en concepto de ingreso por cuota de hermanos.
Otro tema en cuestión, es el pago de la futura casa hermandad, destinando un euro de cada diez de los ingresos ordinarios a la financiación de la misma, la cual está aprobada por la Comisión Económica del Arzobispado de Sevilla, una vez estudiadas las cuentas de la Hermandad y la viabilidad de la financiación.
Quizás el punto más escabroso sea la "herencia de la anterior junta de gobierno", cuyos numeros, según el comunicado, arrojaba un deficit económico, estando actualmente, la economía de la hermandad "saneada".