Después de que el Partido Popular de La Carlota presentase un ruego en el último pleno municipal solicitando la modificación del pliego de condiciones de la Feria de 2014, pues se incurría en un contrasentido que impedía que las casetas tuviesen motivos religiosos durante las fiestas en honor al Patrón, el Cristo de la Misericordia, la alcaldesa carloteña, Rafaela Crespín, anunció que se permitirá la libertad de elementos decorativos.
Así, el equipo de gobierno ha dictado una resolución por la que se retira ese aspecto del punto del pliego, ya que no es conforme a norma, según reconoció la propia alcaldesa. Crespín explicó que se adoptó esta decisión tras valorar un informe que se solicitó a la secretaria del Ayuntamiento al respecto y que viene a dar la razón a los populares, pues reconoce la libertad de elementos decorativos o adornos, aunque contengan connotaciones de ideología política o religiosa, en base al derecho a la libertad de expresión.
En concreto, el informe expone que el artículo 16.1 de la Constitución Española «garantiza las libertades ideológica, religiosa y de culto sin más limitación, en sus manifestaciones, que el orden público protegido por la ley», por tanto, concluye que «efectuando un juicio de ponderación entre el derecho a la libertad ideológica-religiosa y la argumentación aportada por la Concejal Delegada de Cultura del Ayuntamiento de La Carlota hay que admitir que no son causas motivadoras para tal limitación».
La alcaldesa afirmó que «si alguien se ha sentido agraviado por lo que hemos hecho, mi obligación es pedir disculpas como alcaldesa» y continuó diciendo que «no ha habido mala voluntad» y que «el error había sido de forma». Según la primera edil, la intención que subyacía detrás de este nuevo reglamento no era otra que, «primero, que la feria volviera al recinto ferial y, en segundo lugar, evitar de algún modo que se repitiera la situación de los últimos años: que hubiese una caseta del PSOE y otra caseta del PP.
Preferencia por los empresarios
Por su parte, el PP se mostró satisfecho con esta corrección, pero lo que solicitaban en su ruego era que se anulase el pliego de condiciones y se redactase otro nuevo, al entender que se trataba de un acto administrativo nulo de pleno derecho. No obstante, la alcaldesa solo admitió el error en cuanto a la decoración y ha mantenido el resto del documento como estaba.
La portavoz popular, Rafaela Obrero, acusó al equipo de gobierno de redactar un pliego «pensando en cómo coartar la participación de las asociaciones, clubes deportivos, hermandades, peñas o partidos políticos con la excusa de que se quiere favorecer a los empresarios locales. Algo por otra parte falso, puesto que el procedimiento de licitación recoge que se hará por sorteo entre todos los concurrentes, y no aparece ni una sola limitación para que estos tengan que ser de La Carlota».
Por otro lado, el PP recordó que el procedimiento negociado sin publicidad, con una tramitación urgente, supone una restricción de publicidad importante y una limitación en la participación a empresarios que puedan estar interesados. La portavoz popular también puso de manifiesto que «la alcaldesa ni ha cesado, ni ha pedido la dimisión fulminante de la concejala de Cultura por las esperpénticas declaraciones realizadas para ABC ni por todo lo ocurrido...para el PSOE todo vale».
Obrero recordó también que el PP llevaba tres años sin montar caseta de feria y añadió que «lo curioso es que durante muchos años ha habido caseta del PSOE y a nadie le molestaba y nadie se quejaba, pero en cuanto el PP llegó a tenerla, empezaron los problemas».
La portavoz popular se dirigió al equipo de gobierno para decirle que «esta vez os habéis pasado tratando de anular la participación al tejido asociativo del pueblo, llegando hasta a censurar el carácter religioso de esta festividad; con esto se os ha caído la careta y se os ha visto la actitud dictatorial».