Cuando el verano comenzaba a amarillear las tardes nos encontramos con la noticia de una segunda Magna en Córdoba que se celebraría apenas dos años, o poco menos, desde la primera. Nadie, o casi nadie, pensó entonces en el ejemplo de los Dolores con su negativa a participar en el Vía Crucis de la Fe. Si bien, en el último mes el recuerdo empieza a tornarse vivo y lacerante.
Dos cofradías de las que podríamos llamar "señeras" por importancia en sus localidades de origen (Araceli en Lucena y Angustias en Córdoba), han mostrado su negativa a participar en este evento, enmarcado -no lo olvidemos- en los actos conmemorativos del 775 Aniversario de la Santa Iglesia Catedral.
La corporación aracelitana lo decidió en cabildo general, mientras que la corporación de San Agustín lo ha hecho vía decisión de cabildo de oficiales. En el argumentario de esta última ha pesado que "la Junta de Gobierno ha considerado del todo inviable pedir al Cabildo General de Hermanos un cheque en blanco que comprometa los recursos económicos y humanos de la hermandad sin contar con ningún tipo de información acerca de la celebración, ya que el propio Pedro Soldado afirma en su misiva que los principales aspectos de la procesión, como la fecha, el recorrido, la financiación o la duración del acto, no están definidos".
La decisión tomada por las Angustias parece impregnada de una lógica aplastante a tenor del plazo y la información recibidos. No se puede urgir (caso de ser cierta está urgencia) a dar una respuesta sin poseer la información necesaria para obrar en consecuencia. Y, tal vez, los plazos deberían haber sido más flexibles y la comunicación más fluida, aunque quién sabe si aun se está a tiempo. Y, desde la delegación diocesana de hermandades y cofradías, sirvan estos contratiempos para dar un nuevo impulso y la información que las hermandades parecen precisar.
Otras muchas cofradías, en cambio, han dado ya el sí y aun estamos a expensas de saber qué dirán, por relevancia, en San Jacinto y San Pablo. Hay quien ya se pregunta si definitivamente habrá Magna Mariana y más de una voz que, en estos tres para cuatro meses de recorrido (calculen con los tiempos que hubo para decidir en el Vía Crucis Magno), ha clamado contra un evento que, en sus raíces, guarda el mismo sentido contra el que nada esgrimieron en el anterior caso.
Blas Jesús Muñoz
Recordatorio Las Angustias no estará en la Magna Mariana