Hablar de bandas está de moda, sobre todo dentro del mundillo cofrade y capillita. Se habla sin tener ni idea, sin saber más que del solo tal del solista puntero, la composición cual del mejor compositor y poco por no decir nada de las mismas bandas que llevan tras sus imágenes.
Un tiempo en que las relaciones bandas, hermandades no son más que un mero contrato y “mientras me toque todo lo que le pida sin rechistar, la banda que llevo es la mejor”.
Hablar de "la banda que llevo tras mi paso es la mejor" porque tocan tal o cual marcha puntera (y da pena escucharlas) cuando deberían dominar primero lo más esencial. Es época de que hasta grandes nombres dentro del panorama musical cofrade buscan esa frase para engrandecer y hacer creer que su banda es la que hace lo correcto por que toca mas afinado, por que toca más agudo, por que toca la marcha más dura, por que toca la marcha más flamenca, por que toca más clásico etc etc etc. Gracias que hay tantas otras frases, cada cual más acertada y que ponen en evidencia a estos señores. En esta época en la que muchos músicos son ateos y tocan tras una imagen Cristina porque simplemente son músicos, les gusta hacer este tipo de música y respetan la imagen que llevan delante.
Se lleva hablar de nuevas composiciones que no sirven para nada y todo lo antiguo es mejor (nada es mejor por que es nuevo o viejo) lo que es bueno, es bueno da igual cuando se haya escrito. Y hay composiciones que entremezclan estilos y no hay por donde cogerlas
Está de moda hacer creer que es mejor quien más bártulos utiliza para tocar (boquilla, aparato para el embocadura, baquetas especiales) cuando el que es malo, es malo por mucho aparato que utilice.
En una época que cofrades rajan de la gente que lucha por su banda y sus músicos por encima de todo cofrades y músicos de una misma ciudad.
La moda de hablar de bandas.
Alfonso García
Recordatorio La Firma Invitada: El Repertorio Perfecto