Antonio Botella. La Hermandad de la Pasión, de Córdoba, presentaba allá por el mes de febrero el programa de actos y cultos conmemorativos al LXXV Aniversario Fundacional, que pronto llegará a su fin. En el mismo se contemplaba un hermanamiento con la Hermandad del Tránsito en una jornada de mediados de agosto, que, por entonces, quedaba lejos.
Sin embargo, el tiempo trascurre a gran velocidad y esa jornada -concretamente, el 15 de agosto- llegó. En una mañana espléndida, en la cual se aprovechó la consagración de la Función Principal en honor a la Virgen de Acá, se produjo la celebración eucarística que une lazos entre dichas corporaciones.
Ambos hermanos mayores, tanto Manuel Díaz por parte de La Pasión como Bonifacio Gómez por parte de El Tránsito, sellaron el escrito de hermanamiento de manera formal, mas antes de producirse este acontecimiento, sendas entidades mantenían -y continúan manteniendo- una relación más que óptima.
Un vínculo originado a raíz de compartir la misma sede, la Parroquia de Nuestra Señora de la Paz, situada en el castizo barrio de San Basilio. Precisamente, de un grupo de devotos de este distrito, ligados en cierta forma a la Virgen del Tránsito, nació la actual hermandad penitencial, que durante el presente año viene conmemorando sus 75 años de existencia.
Recordatorio De cerca con Boni Gómez Aivar: "Soy de los que piensan que la Semana Santa no es solo esa semana, sino todo el año"