Blas Jesús Muñoz. Lo dijo un Ex Presidente (no el de la Agrupación que pertenece a su mismo partido), subir impuestos es de izquierdas, pobres quienes creyeron alguna vez en su vida que la retribución impositiva circula en un doble sentido que retorna al ciudadano.
Sin embargo, el camino cordobés no se basa sino en el eterno retorno de la inoperancia crónica de los servicios municipales que transitan desde Sadeco a Aucorsa. Estos últimos ven descender su número de viajeros, mientras el tiempo de parada aumenta. Los primeros, directamente, cuesta verlos limpiar y, como de pruebas empíricas vive una parte de la ciencia, caminen por cualquier barrio fuera de la zona noble y miren el suelo.
Ahora suben un 2% el impuesto de recogida de basuras y quién sabe si algún día cercano crearán uno para subvencionar las partidas de dominó y a los pastores evangélicos. Lo que más sangra, la crueldad infinita de estos gobernantes es que escogen para hacer estas actuaciones a alguien que se llamó o se autodenomina cofrade.
No basta haber dirigido a las cofradías durante ocho largos años, como tampoco haber sido pregonero de la juventud. El partido y el sueldo mandan. La Alcaldesa no sale y sus mensajeros dan la verdadera medida de un gobierno que parece que gobierna de oídas de su socio. Los impuestos deberían destinarse a quienes los soportamos.