Blas Jesús Muñoz. Vivimos en la certeza de que el tiempo camina deprisa y la memoria o los cambios de opinión son variables según el estado presente de las cosas. Algo así parece haberle sucedido a algunos miembros del gobierno municipal, especialmente a la Alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio.
Tras los distintos vaivenes, negativa incluida, a cuentas de la procedencia o no del Museo Cofrade, gracias a fuentes cercanas a este medio hemos podido saber que, la propia Isabel Ambrosio, siendo Delegada de Gobierno de la Junta de Andalucía ofreció a la Agrupación de Cofradías la posibilidad de ceder un recinto para que las cofradías tuviesen su museo.
El edificio en cuestión se halla situado en la calle Amador de los Ríos, en la misma acera de la Biblioteca. Un enclave sin duda idóneo para albergar un espacio de este tipo que, además, se halla enclavado en el epicentro del circuito turístico cordobés.
Sin embargo, dicho ofrecimiento no partió solamente de la actual regente cordobesa, sino que lo hizo acompañada de la entonces Delegada Territorial de Cultura de la Junta de Andalucía y del actual, Francisco Alcalde. A ellos tres, hay que sumar una cuarta figura, la del actual Presidente del Parlamento Andaluz, Juan Pablo Durán.
Recordatorio Un concejal vestido de calle para ver a la Fuensanta