Blas Jesús Muñoz. Una falta de respeto, un cúmulo de las mismas, se viene produciendo con pasmosa facilidad durante los últimos tiempos. Prueba de ello la hallamos en la reciente información que publicábamos en Gente de Paz y que versaba sobre la polémica exposición que esta teniendo lugar en el Ayuntamiento de Pamplona, donde puede observarse como el autor dibuja la palabra "pederastia" con hostias consagradas. Una expresión que ha herido la sensibilidad de no pocos pamplonica.
Hasta tal punto ha llegado la situación que la Asociación Española de Abogados Cristianos ha interpuesto una querella criminal por profanación contra el autor de dicha obra, Abel Azcona. Toda vez que la misma podría hacerse extensiva a la Concejal de Cultura, Maider Beloki, en caso de que no se retire esta más que controvertida exposición. Mientras que, por su parte, el Arzobispo de Pamplona, Monseñor Francisco Pérez González, ha emitido un duro comunicado en el que destacan diversos aspectos de consideración.
Así las cosas, en la nota emitida se describe como "el señor Azcona ha manifestado y figura en Diario de Navarra, 21 de noviembre de 2015, que estuvo acudiendo en Pamplona y Madrid a un total de 248 Misas en las que acudió a comulgar pero guardándose la Hostia consagrada sin ser visto. Dichas formas consagradas posteriormente las fue colocando en el suelo hasta formar la palabra «Pederastia» y colocando sobre un pedestal un plato con todas estas formas consagradas".
Dicha acción es señalada como un hecho de la máxima gravedad (para cualquier católico supondría la excomunión), señalando que "atenta contra la libertad religiosa". Toda vez que, Mons. Pérez González, lo califica -como no puede ser de otro modo- de profanación, agradeciendo "a todos los fieles diocesanos y de otras partes sus manifestaciones ante el acto de profanación realizado".