Blas Jesús Muñoz. Esa es la intención con que cuenta el máximo representante de las hermandades cordobesas, tras el malestar que ha causado en no pocos estamentos, la decisión de la Consejera de Cultura de la Junta de Andalucía, Rosa Aguilar, de atender a las "exigencias" del Icomos por encima del informe pericial de arquitectos, técnicos y conservadores con respecto a la apertura de la celosía de Rafael de La-Hoz.
Así las cosas, hace una semana la Asamblea de Hermanos Mayores decidía de forma unánime incorporar el primer templo de la diócesis a los itinerarios parciales de sus respectivas estaciones de penitencia. Una medida que no puede mostrar una alegría completa, debido al hecho de que la apertura de la segunda puerta hubiera facilitado el ansiado traslado de la carrera oficial.
La decisión adoptada por la ex alcaldesa de Córdoba supone una más que probable dilatación de períodos hasta que se conozca el dictamen de la Unesco que, en definitiva, no es vinculante. Y es por ello que el Presidente de la Agrupación de Hermandades y Cofradías tenía intención de mantener una reunión con Aguilar de cara a que reconsidere su postura.
La citada reunión, aun por cerrar en sus detalles, se celebrará probablemente entre finales de esta semana y principios de la próxima. Sobre la mesa estará la posición de las cofradías que, como resulta lógico, va en consonancia con los estudios realizados por encargo del Cabildo, los cuales no suponen daño alguno sobre el monumento, toda vez que facilitan, entre otras, cuestiones de seguridad del mismo.
A ello hay que sumar que se trata de un paso puntual el de los cortejos por el templo en un período muy reducido del año, en contraposición con los miles de turistas que lo visitan a diario. Además, Gómez Sanmiguel cuenta con un informe jurídico que avala las tesis que se han mantenido en favor de la apertura durante este período de tiempo.