Hola.
Mi nombre es Rocío. Hoy le he cogido este aparato tan grande a mi mamá
porque... ¡me encanta ver tanta luz, sonidos y letras! ¡Es algo
increíble!
Como
sabéis vine al mundo en el mes de junio, con una calor que mi mamá me
tenía que llevar a mi paseo en braguitas. ¡Qué vergüenza, pero qué
fresquita estaba! Para dormir me ponía canciones que hablaba de una
mujer que vive en las marismas y que, ¡por fin pude conocer el pasado
mes de octubre! Sin embargo, desde hace unas semanas me pone una música
diferente. En ella se habla de pastorcitos, de un sitio que se llama
Belén, un buey, una mula, de un niño, tres hombres magos que llevan
regalos... ¡Una locura! A la vez, mi mamá toca las palmas y yo intento
bailar poniéndome aún torpemente de pie entre los brazos de mi papá.
Me
ha contado que mi Mamá Celestial, me iba a dar un hermanito, un amigo
con el que jugar. Ya sabía el nombre, se llamaría Jesús. Seguro que
jugaré mucho con él, lo sé.
Mi
mamá me ha explicado que Él será alguien muy importante en mi vida,
porque viene a redimir nuestros pecados, aunque yo esto no lo entiendo
muy bien todavía. Ya me enteraré cuando sea más grande. Espero...
Todo
es luz; y la gente va con mucha prisa por la calle, pero cuando
entramos a las casas se ponen algo tristes porque, según dicen, va
faltando gente.
Mi
mamá también me ha explicado que no sólo ahora es cuando se debe ayudar
a la gente. Que la solidaridad no es cosa sólo de Navidad. Yo, como aún
dependo de ella para todo, estaré pendiente de todo lo que haga la
gente de buen corazón, para hacerlo cuando tenga más edad, los 12 meses.
Me fijaré en lo que hacen las hermandades, porque según he oído los que
deben velar por nuestros derechos han dejado de ayudar a los que más
necesitan.
Pero
sobretodo, queridos amigos, cuando terminen de leer mi primer escrito,
estaré nerviosa ante la llegada de mi hermano, de mi amigo, de Jesús.
Mi mamá Raquel me ha dicho que mi mamá María ya está de parto, pero si
es igual de perrillo que yo fui, seguro que llega al mundo de noche. Así
que estad atentos, porque según me han dicho la luna y las estrellas
brillarán como nunca antes, porque Él traerá la luz.
Como dice todo el mundo ahora: ¡Felices Fiestas! Celebrad con alegría junto a mí la llegada de Jesús, mi amigo. ¡Qué ya vieneee!
