Raquel Medina. Veinticinco años lleva la Imagen del Templete del Vado del Quema dando la bienvenida a los rocieros que siguen el camino de Sevilla. Veinticinco años como testigo de aquellos bautizos de los que, por primera vez, hacen el camino hasta los pies de María Santísima.
La Hermandad del Rocío de Aznalcázar, Hermandad que levantó el monumento en 1991, decidió llevar a cabo un programa de actos para conmemorar el XXV aniversario de su colocación, entre las que se había previsto una salida de la réplica de la Patrona almonteña que posee la filial en la carreta que cada año porta el Simpecado en la romería y celebrar ante el templete una Función Principal.
El Arzobispo de Sevilla ha denegado la solicitud de la Hermandad rociera a la salida extraordinaria, no a la Función Principal, a la que deben acudir sin Simpecado ni Imágenes. La Hermandad de Aznalcázar no presentarán recurso alguno, es decir, acatará esta decisión, aunque no la entiendan.
