Viviéndose el 7 de mayo de 1578, se
digna Dios, revelar al sacerdote Andrés Rolas mediante el Arcángel San Rafael
el misterio oculto durante siglos sobre la Invención de las reliquias de los
Santos Mártires encontrados tres años antes en la iglesia de San Pedro,
manifestándole el culto y veneración que se le debían dar. El padre Andrés de
las Roelas frente aquellas apariciones queda desconcertado, y con objeto de
verificarlas, le dijo aquel Ser de Luz: -“Te conjuro por Dios vivo y por el
misterio de la Santísima Encarnación del Hijo de Dios, que me digas si eres
Ángel de Luz o el Demonio". Y para testimoniar la veracidad de esta pregunta el Varón de
Luz dijo estas palabras: -“Yo te juro por Jesucristo Crucificado que soy
Rafael, Ángel, a quien Dios tiene puesto por Guardián de esta Ciudad.”
La conmemoración de esa fecha, tan trascendental para la historia de Córdoba, ha propiciado que durante los últimos años la Hermandad de San Rafael realice una ofrenda floral al Arcángel y Custodio de nuestra ciudad.
Así, el pasado miércoles se reeditó el citado ofertorio (en el que también se depositaron alimentos no perecederos) en la Basílica del Juramento. Un acto en el que participaron hermandades, ayuntamiento, asociaciones, colegios profesionales, peñas y devotos de San Rafael. El colofón a estos días de culto (del 5 al 7 de mayo) se produjo en la plaza homónima donde el grupo "Serenata" entonó música popular en honor del Guardián de la Ciudad.
Blas Jesús Muñoz