La cofradía de la Pollinica de Alhaurín de la Torre denuncia actos vandálicos para «mofarse» de la imagen, a la que también elevaron las manos hasta casi taparle la cabeza.
«Cuando entramos a la capilla para cambiar a la Virgen y vimos su estado pensamos que ahí había pasado algo, estaba rara». Con voz apesadumbrara relata José Ramos, hermano mayor de la cofradía de la Pollinica de Alhaurín de la Torre, el momento en el que descubrieron que la virgen titular de esta hermandad había sufrido, en algún momento del lunes, una serie de actos vandálicos. En concreto, a esta Virgen de la Pollinica le quitaron sus pendientes y se los cambiaron por otros –de bisutería–; le retiraron la mantilla y le sacaron los cabellos por fuera, además de cortarle un mechón y de colocarle una estrella «decorativa». Asimismo, la posición tradicional de las manos fue cambiada al elevárselas hasta casi taparle la cabeza, provocando la rotura de una rama de romero, regalo del AMPA de un colegio de los alrededores de la iglesia.
Los hechos sucedieron «a lo largo de la tarde hasta las nueve de la noche», según cuenta Ramos. «La imagen está en una capilla de la Iglesia de San Sebastián, pero está colocada a casi dos metros de altura, por lo que es evidente que debieron realizarlo entre varias personas». Aunque un mechón de la peluca sí fue cortado, Ramos afirma que la imagen «ya está perfectamente», porque no se trató tampoco de un robo.
«Visto lo visto creemos que la intención era hacer una burla de la Virgen, de mofarse de ella». Desde la cofradía no tienen ninguna pista de los presuntos autores de este acto vandálico, además de no entender los motivos: «Somos una hermandad pequeña, no nos metemos con nadie y tampoco sabemos cómo alguien puede odiar tanto a la Virgen».
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