Los cofrades de Humildad y Paciencia están de enhorabuena. La hermandad vio cumplido un sueño: firmó la hipoteca de su casa hermandad y puede pagar ya la deuda que tenía con la constructora Hexa, en concurso de acreedores.
La deuda de la cofradía de la calle La Unión se vio agravada en 2009 con el tornado que azotó Málaga y que destruyó gran parte del edificio de su propiedad, que entonces estaba a punto de ser inaugurado. Los peritos cuantificaron los daños en 150.000 euros y la Junta de Andalucía, que entonces se comprometió a ayudarles, le dio 27.000. «Eso provocó que nuestra deuda se inflara y no pudiéramos hacer frente a los pagos», señaló ayer a este periódico el hermano mayor de la cofradía, Rafael González.
La constructora entró en concurso de acreedores por los envites de la crisis y no tuvo más remedio que denunciar a sus deudores, entre quiénes se encontraba Humildad y Paciencia.
González informó de que después de meses de negociación, la hermandad firmó ayer la hipoteca con Unicaja, lo que además ayudará a salir del concurso de acreedores a la constructora. En total, la deuda asciende a 225.000 euros: la empresa recibirá 160.000 a cuenta de la entidad bancaria y otros 65.000 serán abonados en pagarés gracias a un contrato privado firmado gracias a la buena relación existente entre ambas entidades.
«Estamos muy contentos, salimos de los juzgados, que es lo que queríamos», afirmó satisfecho González, que admitió que ya sólo les queda hacer frente a la hipoteca, firmada a 20 años y con una letra pequeña que les permitirá cumplir con la deuda aunque surgieran contratiempos.
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