Blas Jesús Muñoz. La situación alrededor de los incidentes sucedidos en la pasada Madrugá comienza a tomar tintes políticos. Prueba de ello las hallamos, por ejemplo, en las declaraciones efectuadas por el concejal socialista Juan Carlos Cabrera, quien afirma que "a Zoido (el Alcalde de Sevilla) solo le ha interesado la recaudación de los bares y el pronóstico del tiempo".
Por su parte, Juan Ignacio Zoido mantuvo este pasado miércoles una reunión con los hermanos mayores de las seis corporaciones que componen la Madrugada, además de asistir también el Delegado de la misma, Manuel Nieto, quien también ostenta el cargo de Vicepresidente del Consejo de Hermandades y Cofradías.
Pocas fueron las conclusiones de dicha reunión, donde no se arrojó demasiada luz. Eso sí, la única conclusión que se obtuvo radica en la pretensión del ayuntamiento hispalense en ser parte implicada en la confección de horarios e itinerarios, si estos fueran modificados, de cara a la próxima Madrugá de 2016.
De producirse, se produciría por primera vez una injerencia externa tanto al Consejo como a las propias hermandades que son las que han venido teniendo toda la potestad sobre estas cuestiones.
Otra de las conclusiones, de bastante menor calado, fue el compromiso del primer edil sevillano de reunirse con Sacyr para que dote de más seguridad al espacio Metropol Parasol.
