Blas Jesús Muñoz. Tras la celebración de una Semana Santa plena de estaciones de penitencia como pocas se recordaban, la llegada de la Pascua ha traído a las cofradías de la ciudad -letíficas o penitenciales- una renovada vitalidad.
La misma siempre puede apreciarse en la intensa actividad que, a lo largo de todo el año, lleva a cabo la Hermandad del Descendimiento y que se refleja en distintas actividades y proyectos.
Una de las últimas novedades que presenta la corporación de San José y Espíritu Santo la hallamos en la venerada figura de Nuestra Señora del Buen Fin. La titular mariana de la cofradía del Viernes Santo ya luce ataviada para la Pascua, mostrando tanto la esperanza que renueva al mundo estos días como la bella silueta de la Virgen Santísima.
Recordatorio En mi Huerto de los olivos: Hace ya una semana