Blas Jesús Muñoz. Apenas queda un mes y, como casi siempre, todo parece llegar a última hora, precipitado y con los altibajos reconocidos del Vía Crucis Magno, cuando desde la Agrupación de Cofradías se organizó el evento recordando esa máxima tan de andar por casa, del "vámonos que nos vamos". De hecho, cuando esta tarde se presentaba el cartel y el logo (si no tienes un logotipo en estos tiempos no eres nadie), ya hace días que una cofradía participante en el Regina Mater presentaba el propio.
Se anunció hace prácticamente un año y, desde el ente "organizativo" de Isaac Peral, pareciera que no importa presentar los detalles del evento a 39 días de la celebración del mismo. Pensarán, tal vez, que con que se sepa el día hay de sobra. Viendo la anticipación con que se reparten los programas de mano, ni sorprende y una cuarentena se antoja como la extensión misma del universo.
Entre tanto, entre alguna Imagen tan querida y con la que uno tendrá la oportunidad de recrearse porque se salvará nuestro pequeño obstáculo de Viernes Santo, mirando a la Virgen del Rosario, seguramente, echaré en falta a la Virgen de las Angustias.
Como ya explicara Antonio López de Letona a este medio, la ausencia se debía fundamentalmente a que la cofradía no poseía la información necesaria para adoptar una postura positiva en este asunto, señalando que desde la hermandad no se pusieron trabas, si bien tampoco se podía asegurar su participación sin poner en conocimiento de los hermanos los datos que, a los mismos, les permitieran votar en un cabildo a tal efecto.
Así las cosas, el Hermano Mayor puso en valor que, cuando se decidió formar parte en el Vía Crucis de la Fe, la participación en el mismo se puso en conocimiento de los hermanos por medio del cabildo celebrado el 9 de junio de 2013. Al mismo, la junta de gobierno presentó la información precisa para que los asistentes pudieran ejercer el voto conocedores de las cuestiones fundamentales de índole organizativa, etc.
Una ausencia, la de Nuestra Señora, que será notable y, aunque no deslucirá las importantes devociones que se concitarán en torno al templo catedralicio, alguna nostalgia dejará en su poso de "cosas que no pudieron ser".
Recordatorio Los motivos de la negativa de la Hdad. de las Angustias a participar en la Magna Mariana
