Blas Jesús Muñoz. Este pasado fin de semana la Virgen de la
Sierra, Patrona de Cabra, bajaba a su pueblo entre el fervor de sus
devotos que ya se preparan para vivir, junto a su devoción principal,
los días que la verán encumbrarse en el Regina Mater.
Una bajada extraordinaria que no es más que el inicio de dos semanas que, desde la Archicofradía, se vivirán con especial intensidad puesto que la Santísima Virgen, no solo participará en la Magna, sino que, a su vez, visitará diversas localidades donde la devoción hacia esta Imagen Mariana es muy honda.
Diversos detalles marcan este primer acontecimiento, tales como el Corazón que portaba el Niño Jesús que, gustosamente, le ha cedido para la ocasión la Hermandad del Perdón. Dicho corazón lo porta habitualmente María Santísima del Rocío y Lágrimas.
Por otra parte, la Virgen de la Sierra está ataviada de forma sumamente elegante, en parte, gracias a la saya que que se confeccionara en los talleres de bordado de Esperanza Elena Caro. Dando cuenta del rico patrimonio de la corporación egabrense.
Una bajada extraordinaria que no es más que el inicio de dos semanas que, desde la Archicofradía, se vivirán con especial intensidad puesto que la Santísima Virgen, no solo participará en la Magna, sino que, a su vez, visitará diversas localidades donde la devoción hacia esta Imagen Mariana es muy honda.
Diversos detalles marcan este primer acontecimiento, tales como el Corazón que portaba el Niño Jesús que, gustosamente, le ha cedido para la ocasión la Hermandad del Perdón. Dicho corazón lo porta habitualmente María Santísima del Rocío y Lágrimas.
Por otra parte, la Virgen de la Sierra está ataviada de forma sumamente elegante, en parte, gracias a la saya que que se confeccionara en los talleres de bordado de Esperanza Elena Caro. Dando cuenta del rico patrimonio de la corporación egabrense.
Fotos Fernando Castro