Antonio Rendón. En la Capilla de la Santa Cruz del Rodeo que data de 1502 mora una de las seis Vírgenes del Carmen de Sevilla que sale en
procesión. La calle Calatrava se engalana para recibir las andas de la
Stma. Virgen del Carmen, que fue llevada a hombros de fieles y devotos, fue comandada por el capataz Antonio Santiago y presidida por el
delegado de Gloria Andrés Martín Angulo, acompañado del nuevo Hermano
Mayor Juan José Sánchez Moro, abogado de profesión y los hermanos
mayores de las hermandades del Carmelo. El cortejo, también estuvo
acompañado por un grupo de marineros de la Armada Española con sus
correspondientes jefes militares.
La Virgen del Carmen estrenaba un manto liso de capa donado por sus
hermanos/as. Además portaba diadema y ráfaga para la ocasión. La Virgen presidió la primera de las dos procesiones de la advocación del
Carmelo que pasea por el rio Guadalquivir.
La Virgen fue trasladada hasta el paseo de Juan Carlos I donde se
embarcó para recorrer la procesión fluvial de la imagen mariana que fue
llevada hasta el río, donde a bordo de un barco fue paseada en
el tramo comprendido entre el Puente de la Barqueta y la Pasarela de
la Cartuja.
En la Pasarela de la Cartuja en torno a las 21 horas tuvo
lugar el homenaje de rezo y plegaria con el director espiritual y con
ofrenda de una corona de laureles y flores en memoria de los marineros
difuntos. Culminado el acto memorial la procesión emprendió la
navegación de regreso hasta la cimentación del Puente de la Barqueta,
donde tuvo lugar el desembarque.
Le acompañó a la ida musicalmente la Banda de Música Juvenil de
Nuestra Sra. de la Victoria (Las Cigarreras). Tras la vuelta de la
procesión se celebró un Rosario vespertino por las calles de su
feligresía, por el coro de Campanilleros Paz y Misericordia del barrio
sevillano de Roche Lambert.
Fotos Antonio Rendón Domínguez