Guillermo Rodríguez. Son muchas las ocasiones en las que en virtud de artículos de opinión crítica con el devenir actual de nuestras hermandades, son acusadas de no respetar su historia y de olvidar sistemáticamente aquellos elementos que configuraron su esencia en tiempos pretéritos. Por eso cuando una corporación realiza esfuerzos en pos de buscar en el arcón de su memoria lo que antaño fue, merece el justo reconocimiento por rescatar aquella parte de su espíritu que un día constituyó su realidad y que por las cuestiones del destino paso a engrosar esa parcela olvidada por el gran público y en ocasiones por sus propios hermanos. Resulta hermoso y gratificante en estos tiempos que corren, cuando las cofradías rinden tributo a la riquísima historia que atesoran. Una historia que se compone de multitud de recuerdos que configuran ese rosario de tradiciones olvidadas o perdidas que nunca debieron perder su lugar.
En la búsqueda de ese pasado que siempre han ser presente, la Real e Ilustre Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, María Santísima Nazarena y San Bartolomé, celebra los días 31 de Octubre, 1 y 2 de Noviembre un Solemne Triduo en honor de Nuestra Señora de la Soledad, antigua Titular de la Cofradía, en la Capilla de la Residencia de Jesús Nazareno. Un culto que comenzará a las 20:30 horas con el ejercicio de Triduo y posterior Eucaristía.
En la búsqueda de ese pasado que siempre han ser presente, la Real e Ilustre Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, María Santísima Nazarena y San Bartolomé, celebra los días 31 de Octubre, 1 y 2 de Noviembre un Solemne Triduo en honor de Nuestra Señora de la Soledad, antigua Titular de la Cofradía, en la Capilla de la Residencia de Jesús Nazareno. Un culto que comenzará a las 20:30 horas con el ejercicio de Triduo y posterior Eucaristía.
El día 2 de noviembre, festividad de los Fieles Difuntos, la Misa se ofrecerá por las almas de todos los hermanos de la Cofradía y familiares de los mismos, fallecidos.
Cabe destacar que al permanecer la Capilla de Jesús Nazareno cerrada por reformas, se podrá acceder al templo por la puerta de la Residencia de Jesús Nazareno que se encuentra situada en la calle Buen Suceso número 1.
