Las travesuras de la meteorología dejaron al pueblo de Córdoba sin la anhelada salida extraordinaria de la Hermandad de la Esperanza el pasado sábado. De la realidad se pasó al sueño. El sueño de revivir unas imágenes que se produjeron unos siete meses atrás. El sueño de acompañar nuevamente a las devotas imágenes de Jesús de las Penas y de María Santísima de la Esperanza en su transitar por las calles califales. El sueño de sentir la emoción del público ante una arrancada del "galeón" a los sones de La Pasión de Linares. El sueño de escuchar el repique de las campanillas de las bambalinas del palio de la Niña Gitana. Pero el sueño quedó en nada...
Los caprichos de la lluvia echaron por tierra el guión previsto para ser llevado a cabo en una tarde que, como sueño que era, estaba acompañada por un sol de justicia, que guiaba el recorrido trazado por la corporación calé de manera extraordinaria; a los acordes musicales de los "hermanos" de Linares y ante la atenta mirada de los cordobeses, un "galeón" de Penas se abría paso entre un mar de fieles, deseosos de recibir la bendición del Dios Moreno; el cortejo tocaba a su fin, el sueño se terminaba, y fue entonces cuando apareció la Madre de la Esperanza, radiante como siempre, jubilosa como nunca, que seguía los pasos de su Hijo mientras los rezos musicales de su banda mitigaban su eterna aflicción.
Pero como los sueños, sueños son, y no obedecen a la realidad, la situación que se presentó fue bien distinta a la anhelada, dejando imágenes de desolación en el seno de la corporación de San Andrés, en la de todos los cofrades (tanto los que a las puertas de la parroquia esperaban el milagro que no llegó como los que más tarde se acercaron al templo para visitar a las Imágenes), y en la de Córdoba entera.
Sin embargo, no hay que quedarse con el aspecto negativo, aunque cueste aceptar la cruda realidad, y repasar los grandes momentos de los cuales nos está haciendo partícipes la cofradía con motivo de sus setenta y cinco años de vida. Habrá que esperar al 20 de marzo de 2016 para contemplar a la hermandad por las calles de una Córdoba que, pese a la suspensión de la procesión, estuvo escoltando a los Titulares pasionistas el pasado día 17.
Antonio Botella
Fuente Fotográfica
Recordatorio Entre bambalinas: Las cofradías cordobesas de nuevo en el punto de mira