Blas Jesús Muñoz. Las hermandades renuevan su ilusión a cada instante. Actualizan su mensaje de año en año para transmitir el valioso legado que atesoran que no es otro que el que se conserva en la piedad popular, la manera de entender la fe de un pueblo.
Un tesoro que, por supuesto, se halla también en los más jóvenes de nuestras corporaciones quienes, más allá de suponer la vitalidad que se posa en el horizonte, suponen a su manera un presente radiante. Y así lo entienden muchas de nuestras cofradías como la cordobesa Hermandad de la Santa Faz
La corporación del Martes Santo cordobés celebraba este pasado viernes día 6 uno de los actos que establece su Reglamento de Régimen Interno, que no era otro que la toma de posesión como Hermano Mayor de Rafael Ortiz y los diversos miembros de su Junta de Gobierno.
Un acto que, pese a lo protocolario, se erigió de manera muy especial para los cofrades de la Trinidad que quisieron concitarse para arropar a una Junta de Gobierno cuya andadura renueva una etapa más que ilusionante para la Hermandad.