Raquel
Medina. La pasada madrugada, con la Navidad a la vuelta de la esquina,
las camaristas de Nuestra Señora del Rocío han procedido a cambiarla de
ropa.
Por
la celebración que se avecina, se le ha puesto el traje color
buganvilla, estrenado en 2009, con puños a juego y flores en tonos
malvas. Ya está preparada para la llegada de su Divino Hijo, el Pastorcito Divino, la noche de Nochebuena.