Blas J. Muñoz. Lo hemos venido contando durante estos últimos meses. Una por una, un nutrido número de hermandades, de la capital o foráneas, han ido discurriendo en las figuras de sus representantes ante Ella. No se trata de un ritual protocolario, sino del tributo ante una historia con continente y contenido devocional a manos llenas.
El pasado viernes les narrábamos cómo el diestro Juan Serrano, "Finito de Córdoba" se encomendaba ante Nuestra Señora de los Dolores, antes de su aparición en la Maestranza de Sevilla. Anteriormente, cómo la Hermandad de la Estrella acudía al corazón de San Jacinto para ganar su Jubileo ante la Señora.
En la jornada de este domingo día 17 la Hermandad de los Dolores compartía en redes sociales otras dos visitas que atestiguan los frutos de su celebrado Año Jubilar. Se trataba de la Hermandad de San Juan Evangelista de la localidad de Luque y la Archicofradía de Nuestra Señora del Carmen Coronada de la capital cordobesa.
El Aniversario de su Coronación Canónica ha convertido San Jacinto en un lugar de peregrinación para todas las cofradías, para los fieles y devotos que contemplan ante Ella el Arca de la Alianza renovada que cumple su analogía con la ciudad que habita.
Recordatorio Tres siglos de amor y cincuenta años coronada