Hacía bastante tiempo que el bipartito, o tripartito -tanto cambio de denominación que uno ya no sabe de cuántas alianzas políticas se conforma 'nuestro' Ayuntamiento-, no ocupaba líneas en esta sección; bien porque no habían razones para ello, o bien porque han salido otros temas de mayor interés de los que tratar. El caso es que unas declaraciones de la alcaldesa Isabel Ambrosio han dado a pie a escribir este artículo, pues de su testimonio se extraen unas palabras, cuánto menos, curiosas y que suenan a la misma canción de siempre: me disculpo, rectifico y, al tiempo, vuelvo a caer en el ultraje.
Y es que 'nuestra' alcaldesa -vuelvo a poner el entrecomillado, ya que pese a ser oficialmente regidora de todos los cordobeses, no lo es así en la práctica- considera que excluir la parte religiosa de la Velá de la Fuensanta sería un grave error, con lo cual se retracta, en cierta forma. de la decisión adoptada el pasado año 2015 con respecto a esta feria; esto es, no incluir los actos religiosos dedicados a la Imagen letífica en la programación de eventos. Es por ello que la Junta de Gobierno Local, junto con la dirección de Distrito Sureste, ha tenido la gentileza y la amabilidad de introducir en el programa del presente curso la información relacionada con los actos honrados a la Co-patrona: 'llegada de la imagen de la Fuensanta a su iglesia'. ¿Lo dice usted en serio, señora Ambrosio?, ¿de verdad cree que con esta simple reseña se está dando importancia a la sensibilidad religiosa de la velá? ¿Dónde quedan el rosario vespertino del día 6 y las eucaristías de los días 7 y 8? Y aunque fuera de programa, ¿ni tan siquiera una nota acerca de la novena que comienza el día 9? Basta ya, oiga, basta ya...
No quieran hacer lo blanco en negro, no quieran ocultar las raíces que sustentan al origen de la velá. Sin la figura de Nuestra Señora de la Fuensanta, esta feria carecería de fundamento alguno, dado que es el icono alrededor del que se organiza tal celebración, de germen religioso, no lo olviden. Por tanto, es completamente incomprensible, ilógico, disparatado, esa vehemencia por querer renegar el motivo principal de la festividad; si no les llena de regocijo su procedencia, invéntense otra verbena que puedan estructurarla a su modo, pero dejen la organización de la Velá de la Fuensanta en manos de quien verdaderamente valore la impronta original de ésta.
En los tiempos que corren es de suma importancia realizar campañas de sensibilización y de denuncia social ante las injusticias que nos tragamos día tras día, aunque hay situaciones y situaciones donde desarrollarlas. Tal como es el mismo caso de la velá, en la cual el tema principal gira en torno a la condición de los refugiados. Sinceramente, ¿creen que se trata del lugar oportuno? Y puestos a reivindicar, ¿se reivindicará también la cruda realidad de los cristianos perseguidos en Oriente Medio? O, ¿acaso eso no les interesa...?
Antonio Botella
Foto Javier Cantos Lozano
