Y parece que me leyó, ¿verdad? La semana pasada hablaba de la Obra Social en este mundo que nos ocupa. Precisamente hablaba de la visita a los enfermos. Y... ¡Hay que ver, el Santo Padre visitando a bebés enfermos esta semana! ¡Qué casualidad! ¡Qué bendita casualidad!
Cuántas veces he soñado con la imagen de un Hermano Mayor o un simple hermano mostrando una escena como ésta que ilustra hoy mi artículo. ¡Qué grande es el Papa Francisco!
Sé que es complicado por el quehacer diario, pero no podemos dejarnos caer en el sillón. Debemos levantarnos, aunque estemos cansados y dedicar un poco de nuestro tiempo a los demás. Sé que es complicado por la falta de tiempo, que no es sino una excusa que nos hemos buscado, pues para lo que deseamos sacamos tiempo hasta de debajo de las piedras, ¿verdad?
No quiero ser repetitiva, por eso corto hoy aquí, pero no podía dejar pasar esta fotografía del Papa sosteniendo a un ser indefenso que necesita todo nuestro apoyo y nuestro cariño.
Raquel Medina
