Adrián Martín. El ayuntamiento de Córdoba, tras su remodelación, ha cambiado al responsable y enlace con las cofradías de la ciudad. Si bien no ha cambiado de concejalía si lo ha hecho su edil, siendo el nuevo responsable de este área Emilio Aumente, el concejal de Presidencia será el encargado de recibir a las hermandades cordobesas cuando tengan que acudir al consistorio, apartando de esta función a David Luque.
Así, el concejal socialista será el encargado de mantener el clima de tranquilidad que su antecesor había logrado, pero este clima puede pasar de la calma a la tensión si Aumente sigue con su tradicional discurso para con las Hermandades y Cofradías. Cabe recordar cuando el edil sugirió cobrar a las corporaciones por la presencia de la Policía Local en cortejos procesionales y actos religiosos o los costes de la limpieza de la cera que los nazarenos dejan a su paso. La clave es en como seguirán las negociaciones sobre el traslado de la Carrera Oficial a la Catedral de la ciudad.
Mientras, en Sevilla, el Excmo. Alcalde de la ciudad, Juan Espadas, es junto a los responsables de Seguridad y Fiestas Mayores quien se reúne con las hermandades, sin ir más lejos, como hizo con Las Cigarreras días atrás, de cara a la colaboración entre el Ayuntamiento y la corporación para diferentes proyectos que la Hermandad tiene en mente o conocer de primera mano la gestión de los terrenos de la Fábrica de Tabacos propiedad de Altadis.
Es curioso, como de una ciudad a otra, siendo la misma coalición quien gobierna ambas, cambia la política respecto a las Hermandades y Cofradías, ya sea de gloria o penitencia. En Sevilla la colaboración municipal es casi máxima, sin embargo en Córdoba es bien conocida la problemática entre las hermandades y el Ayuntamiento. Quizás, sin duda, deberían aprender de sus compañeros sevillanos para poder gestionar, para bien, la relación entre dos organismos que se necesitan mutuamente.
Foto Antonio Poyato