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domingo, 13 de noviembre de 2016

Un recorrido histórico por el rostro de la Misericordia según el arte sacro


Irene Gallardo. Mediante la bula papal, del 11/04/2015, víspera de Fiesta de la Divina Misericordia, S.S. Francisco I proclama el Año Jubilar de la Misericordia.  

El Concilio de Trento, (1545-1563), recomienda la estación pública, exponiendo la necesidad y ventajas que se derivan del culto a las imágenes, verdadera efigie de Jesús y de su madre, dejando patente, que estas imágenes deben salir a la calle para que el que por su voluntad no entra en la iglesia, al encontrarse con ellas en la calle piense en el momento de la Pasión de Nuestro Señor que la imagen representa. 

Las cofradías ya existían en los siglos XIII al XV, muchas de estas desaparecieron, otras se refundaron y escasas sobrevivieron a los tiempos. Durante la Edad Media, se procesionaban las reliquias, las imágenes lo hacen en el XVI, si bien es cierto, que en Sevilla existían ya procesiones en las que un Crucificado era portado a mano, caso de la Vera Cruz, del convento Casa Grande de San Francisco, desde 1448 (se tienen datos de la misma desde 1320) y del Santo Crucifijo del Convento de San Agustín en 1314. El número de cofradías de sangre, luz y vela y de gloria, era muy importante en el XVI, 12.000 cofrades penitenciaban, según cuentan los historiadores Sigüenza y Mal Lara.  

De entre las cofradías de más antiguas fundación se encuentran la de Ntro. Padre Jesús Nazareno, el Silencio, probablemente fundada en 1340. Los Negritos, fundada por el Arzobispo don Gonzalo de Mena y Roelas en 1393 y El Valle, formada por la fusión de dos Hermandades la más antigua de 1450, entre otras. 

El primer lugar que visitamos fue la Real Iglesia de San Antonio Abad, sede de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de la Concepción, conocida como El Silencio. 

Ubicada en la antigua calle de las Armas, la Real de San Antonio Abad, es el fruto de la unión de dos edificios, de ahí sus dos naves actuales.  

Así, de un lado estaba la capilla de Jesús Nazareno y de otra, la Iglesia de San Antonio Abad, que formaba parte de un antiguo hospital, fundado por Alfonso X en 1366 destinado a atender a los aquejados del “Fuego de San Antón o Fuego Sacro” siendo encomendado su regencia a los religiosos antonianos. 

Al suprimirse la orden, el edificio fue habitado por los franciscanos dieguinos pasando a ser la sede de la Parroquia de San Miguel, tras la demolición incomprensible de dicha iglesia.   Se fundó la Primitiva Hermandad de los Nazarenos de Sevilla en la iglesia parroquial de Omnium Sanctorum, en la cuaresma del año de 1340, por un grupo de piadosos vecinos del barrio de La Feria.  

Hizo su primera salida procesional a la ermita de San Lázaro, extramuros de la puerta de la Macarena, el 14 de Abril de ese mismo año de 1356.  

Nuestro Padre Jesús Nazareno: totalmente anatomizada, es de madera de cedro, obra atribuida a Francisco de Ocampo y Felguera, hacia 1610.  

María Santísima Virgen de la Concepción: es obra del escultor Sebastián Santos Rojas, en 1954. Sustituyendo a la anterior Titular, obra de Cristóbal Ramos. 

Tras visitar la impresionante sala de exposición de enseres y hacernos la foto de grupo, abandonamos la Real Iglesia que tuvimos el privilegio de visitar a puerta cerrada y solo para nuestro numeroso grupo, nos encaminamos hacia la Capilla del Dulce Nombre de Jesús, sede canónica de la Archicofradía de la Santísima Vera Cruz, Sangre de Nuestro Señor Jesucristo y Tristezas de María Santísima. 

La Hermandad de la Vera Cruz tiene su sede canónica en la Capilla del Dulce Nombre de Jesús, desde el 2 de Noviembre de 1942. 

Es muy probable, que el templo se construyese sobre la mezquita existente en el complejo árabe denominado “baños de la Reina Mora”, dado que el “baño” formaba parte del ritual religioso de los viernes, antes de comenzar la oración, por lo que junto a este complejo de higiene, tenía que existir una mezquita, que pudo encontrarse justo en este lugar. 

En 1540 se estableció un “recogimiento de mujeres de mala vida que de ella quisieran arrepentirse”, que le da el nombre del Dulce Nombre de Jesús, denominación que se ha mantenido hasta nuestros días. La bula de fundación la otorga el Papa Paulo III a petición del rey Felipe II. 

Posteriormente, será en 1551 cuando se establezca  en dicho lugar una comunidad de Madres Agustinas que perdurará en el tiempo hasta su extinción en 1837 con motivo de la exclaustración y desamortización de los Bienes de la Iglesia, pasando la comunidad al convento de San Leandro.   

Hermandad de la Santísima Vera Cruz, Sangre de Nuestro Señor Jesucristo y Tristezas de María. En el año 1.370 ya se reunían devotos de la Vera Cruz en este convento para dar culto al Santo Madero. 

La Hermandad de la Santísima Vera Cruz aprueba sus primeras reglas en 1.448 en el Convento Casa Grande de San Francisco. 

En un principio se estableció en una capilla situada a la entrada del convento, que le proporcionaba una cierta independencia en sus cultos con respecto a los de la comunidad franciscana, pero el gran auge que pronto experimentó la Cofradía hizo que se trasladase en 1.478 a otra capilla más espaciosa, en el interior del recinto. 

Santísimo Cristo de la Vera Cruz: El Santísimo Cristo de la Vera Cruz, es de autor anónimo de la primera mitad del siglo XVI, de enorme Unción Sagrada. 

María Santísima de las Tristezas:  La Santísima Virgen de las Tristezas es obra de Antonio Illanes, en 1944. La cofradía le nombra por ello Hermano de Honor. 

Cuando la discreta campana conventual del Dulce Nombre de Jesús, proclamó la hora del Ángelus, como es costumbre en la Hermandad de la Vera Cruz se rezó el ángelus ante la Santísima Virgen de las Tristezas, en esta ocasión y para alegría de la corporación del Lunes Santo, el rezo fue llevado a cabo por todos los participantes del itinerario un total de 73 personas. Las personas que lo desearon pudieron besar y tocar la cruz donde el Señor de la Vera Cruz estuvo durante más de trescientos años y que es obra del escultor Blas Molner.   

Con un cielo amenazante de lluvia, nos dirigimos hacia la Real Parroquia de Omnium Sanctorum, donde nos esperaba su párroco D. Pedro Juan Álvarez, que también intervino en el itinerario aportando datos curiosos y anécdotas históricas muy interesantes y que nos acogió con mucho. Hicimos la visita al templo de manera privilegiada a puertas cerradas.  

Al llegar a las puertas de la parroquia fernandina, nos recibió la Hermana Mayor de la Reina de Todos los Santos Rosario de la Peña, que nos dio una cordial bienvenida. La hermandad, procesionó a su bellísima Titular el domingo día 6 por la tarde, en el entorno de las calles de su feligresía, la del Barrio de la Feria, de quien es patrona. 

Omnium Sanctorum fue erigida tras la Conquista de la Ciudad, dentro de la collación designada a Alvar Negro, uno de los caballeros que ayudaron a San Fernando en su empresa reconquistadora. En origen se reaprovecharon las instalaciones de una vieja mezquita almohade, efectuándose una primera reforma en tiempos de Pedro I, tras el terremoto de 1355, de estilo gótico-mudéjar.  

La Parroquia fue incendiada en las contienda de 1936, quedando tan sólo los muros y las pilastras en pie. Su reconstrucción fue encargada al arquitecto D. Juan Talavera Heredia, gran arquitecto regionalista. Tras la reedificación, el Templo se inauguró el 12 de Octubre, día de la Virgen del Pilar, del año 1940. 

La iglesia se alza sobre planta cuadrada, formada por tres naves con cinco tramos cada una. Presenta una cabecera muy pronunciada, que se organiza en tres tramos y otro pentagonal cubierto por una bóveda de nervadura y sujeta al exterior por potentes contrafuertes. 

Ésta es de estilo gótico del siglo XIV. 

Tienen su sede canónica tres hermandades en la Parroquia de Omnium Sanctorum. 

Hermandad Sacramental de la Reina de Todos los Santos: Se fundó a mediados del siglo XVII.  La Señora está fechada en 1554 siendo obra del imaginero flamenco Roque de Balduque.  

Hermandad de los Javieres:  Fundada en 1955, en el convento de la Orden Jesuita de la calle Jesús del Gran Poder. Santísimo Cristo de las Almas es obra de José Pirés Azcárraga. María Santísima de Gracia y Amparo es obra de José Manuel Rodríguez Fernández Andes.                                                  
Hermandad del Carmen Doloroso:  Se erige en 1982, por un grupo de jóvenes que se encontraban haciendo el Servicio Militar en San Fernando.  Nuestro Padre Jesús de la Paz es Francisco Reyes de Villadiego en 1990. Nuestra Señora del Carmen en sus Misterios Dolorosos es obra de Francisco Berlanga de 1984.  Nuestra Señora de las Maravillas: imagen de Francisco Reyes Villadiego en 2014 

Con las palabras cariñosas de despedida dirigidas hacia el grupo, por parte del párroco de Omnium Sanctórum y nuestra esperada foto de grupo ante la Reina de Todos los Santos, pusimos punto y final, al segundo itinerario dedicado al rostro de la misericordia en su año jubilar. 

Desde Sacra Híspalis, queremos agradecer a la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima Nazarena, a su Junta de Gobierno y todos los hermanos y hermanas que participaron en el itinerario, su asistencia al mismo y la acogida que éste ha tenido. Asimismo, queremos agradecer la participación en el mismo, de la nutrida representación de la Agrupación de HH y CC de Córdoba y a su Presidente. 

Desde estas líneas expresamos nuestra inmensa gratitud por el trato y la deferencia que han tenido con nuestros participantes: 

D. Alberto Ybarra Mencos, Hno. Mayor de la Hdad. de Nuestro Padre Jesús Nazareno. D. José de Cristóbal González, Hno. Mayor de la Hdad. de la Santísima Vera Cruz. Rvdo. Padre D. Pedro Juan Álvarez Barrena, párroco de la Real de Omnium Sanctorum. Dña. Rosario de la Peña Fernández, Hna. Mayor Hdad. de la Reina de Todos los Santos Dña. María de los Remedios Vilches Trujillo, Hna. Mayor de la Hdad. de los Javieres. D. Antonio Saldaña Sánchez, Hno. Mayor de la Hdad. del Carmen Doloroso.  Y a los sacristanes y capilleres: Sebastián, Ventura y Miguel. Gracias a todos por su participación, sin ustedes no hubiese tenido sentido la elaboración de este itinerario.  

Si les gustó, no olviden recomendarnos. Sacra Híspalis, lleva cinco años realizando itinerarios con mucho esfuerzo, profesionalidad y cariño. Cinco años de arduo trabajo, cinco años haciendo historia 

























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