Córdoba vive un acontecimiento histórico con la representación de la Pasión de Cristo a través de 18 pasos en procesión hacia la Catedral.
Han llegado las horas más soñadas, el instante más anhelado. Esta tarde Córdoba será un gigantesco escenario en el que 18 cofradías representarán la Pasión de Cristo en cada una de sus estaciones en una jornada que ya es histórica. Si la climatología lo permite —y parece que va a ser que sí porque el riesgo de tormenta en muy bajo, apenas del 10 por ciento— la celebración del Año de la Fe alcanzará esta tarde sus momentos culminantes con un cortejo extraordinario que congregará a más de 150.000 personas según los cálculos de la Agrupación de Cofradías y Hermandades, 8.000 de ellas en el recorrido oficial de la procesión, que comienza en la Cruz del Rastro, continúa por la Ribera y pasa por la Puerta del Puente para alcanzar la Catedral por la Puerta del Perdón y después por la de las Palmas.
Selección de cofradías
Nuestra Señora Reina de los Mártires, la única Dolorosa bajo palio de la cita, abrirá el cortejo, en el que el paso siguiente será la Oración en el Huerto y el último el Señor Resucitado. Entre ellos irán el Señor Rescatado, Jesús de las Penas, Jesús de la Redención, Jesús de la Sentencia; la Coronación de Espinas; Jesús de la Pasión; Jesús Caído; el misterio de la Santa Faz; Humildad y Paciencia; Cristo del Amor; Cristo de la Expiración; Cristo del Remedio de Ánimas; Descendimiento; Virgen de las Angustias y Santo Sepulcro. La Agrupación de Hermandades ha escogido a las cofradías por la adecuación a las escenas y la calidad artística. Las imágenes irán siempre en sus pasos procesionales con sus misterios, si los tienen, y con un cortejo que incluye cruz de guía, diez parejas de hermanos, sin atuendo de nazareno y con cirios y estandarte.
Aunque las hermandades que lo deseen llevarán música en sus caminos de ida y vuelta, tendrán que prescindir de ella al llegar a la Cruz del Rastro. Las únicas excepciones serán Nuestra Señora Reina de los Mártires, que sí irá con banda de música, y el coro de hermanos entonando el Miserere tras el Cristo del Remedio de Ánimas. Ante Nuestra Señora Reina de los Mártires irán las cruces de guía de las hermandades, participantes o no, que deseen estar. La titular de la Buena Muerte presidirá un homenaje a los Santos Mártires de Córdoba, presentes en su advocación, y recibirá una ofrenda de cera y flor. Al llegar al Triunfo será el rezo de las estaciones, que leerá el cofrade Fermín Pérez Martínez y que dirigirá el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández. Al arribar a la Catedral, y una vez que estén todos los pasos allí, habrá una homilía, también pronunciada por el prelado, y una exposición del Santísimo, a la que asistirán sólo los cortejos de las cofradías.
Una de las claves del éxito de la cita será la preocupación por la seguridad. Para garantizarla, no habrá largos cortejos de hermandades seguidas, pero sí calles por las que se verán varias a la vez. De otro lado, el dispositivo de seguridad estará formado por unos 300 efectivos, entre policías (locales y nacionales), bomberos y miembros de Protección Civil. Los agentes prestarán especial atención a los puntos de gran aglomeración, como la Cruz del Rastro o la calle Deanes. Además, en el Patio de los Naranjos de la Mezquita-Catedral se ubicará un hospital de campaña.
El Via Crucis tendrá una especial incidencia en el tráfico. A las 17.30 horas se cortará Ronda de Isasa al tráfico, pero también al paso de peatones. Nadie podrá circular por esta zona, que forma parte de la «carrera oficial» de este Via Crucis. Aquí sólo lo podrán ver quienes ocupen una de las 8.000 sillas que se han ofrecido desde el mes de julio por precios de entre 6 y 10 euros. Está previsto que la primera hermandad llegue a la Cruz del Rastro a las 20.15, aunque para entonces ya hará más de tres horas que esté inaccesible. No será el único lugar, lo que ha obligado un esfuerzo organizativo.
A las 17.30 se cortarán todos los accesos por varios puntos, y habrá policías locales controlando el paso aunque se permitirá a vecinos y clientes de restaurantes y hoteles. Estarán en la calle Judería, en el cruce entre la calle Magistral González Francés y Céspedes y en Medina y Corella. Tampoco se podrá pasar por Amador de los Ríos, que conduce hasta la zona del Triunfo, y habrá un control en el cruce entre Santa Teresa Jornet y la Ribera. Ni siquiera se podrá llegar a través del Puente Romano, que estará cortado a la altura de la torre de la Calahorra, es decir, en toda su longitud. A las 19.00 horas, en las calles Puerta del Rincón y Alfaros sólo permitirá el paso peatonal. Tampoco se podrá circular por la calle de la Feria.
