Pues bien... un año nuevo ha comenzado. Un año cargado de esperanza y de ilusiones para la que os escribe. Un año en el que la familia, la de sangre y la que una elige, se verá incrementada con un nuevo miembro. Un año donde coger una maleta y meter todo lo dañino y quedarse con lo que nos haga bien. Un año donde desapareceré un tiempo para alegría y gozo de muchos, pero sobretodo para mí.
Un año que empezó, como todos, dando gracias por poder vivirlo, pero también reflexionando. Reflexionando sobre el pasado año y la actitud tan penosa de algunas personas hacia algunos compañeros.
Sí, a vosotros me dirijo. A vosotros, a los que tan inseguros estáis de vuestros hechos que, veis en unas líneas de cofrades rasos de a pie, un peligro que sólo ven vuestros sucios ojos. Sí, a vosotros, a los que nos dais la importancia y nos ponéis en el lugar al que nunca pretendimos llegar. Sí, a vosotros, a los que predicáis la libertad, el consenso, el respeto, a los que queríais ser reconciliadores y sólo lucháis y vivís por vuestra propia paz y bienestar.
Atrás quedó un año de amenazas, de hermanos mayores que, más que hermanos en Cristo, parecían matones de mafias italianas; de elecciones problemáticas en algunas hermandades, el ascenso del equipo de fútbol y celebración, micrófono en mano, en pleno altar de Corpus..., a ti, te digo que por si te preocupa mi situación personal, preguntes en la parroquia de San Miguel, 09/06/12.
Por delante queda un año esperanzador, con nuevas ilusiones y espero que con la construcción de puentes entre algunas personas e instituciones. Queda un año de pasos en la calle, aunque no sea defensora de las salidas extraordinarias. Queda un año por vivir, un año para enmendar errores que se han cometido; un año por delante para reflexionar.
Pensemos en pasar el año 2015 en la mejor armonía y como dice la canción: "romero, romero, romero, que salga lo malo y entre lo bueno".
¡Feliz Año 2015 para todos!
Raquel Medina Rodríguez
Recordatorio El Cirineo: Tanta Paz lleves como descanso dejas
