Blas Jesús Muñoz. La relación entre el mundo del toro y las cofradías ha estado íntimamente ligada a lo largo de la historia, a través de ejemplos célebres que casi cualquiera puede conocer. Una reciprocidad que viene resaltado en lo positivo e igualmente relacionada en sus puntos más oscuros.
Así las cosas, durante los últimos meses hemos podido comprobar como, mientras el papel de la Semana Santa y las Hermandades como canalizadoras de la misma se ha puesto en tela de juicio en muchos de sus aspectos, no es menos cierto que el papel de la tauromaquia también se halla en una delicada situación.
En lo referente a las cofradías se cuestionan aspectos que transitan desde la representación de las autoridades civiles en las procesiones hasta los modelos de financiación de las mismas. Por su parte, el mundo del toro vive sometido a una presión que se manifiesta en casi todos los ámbitos, hasta el punto de que, recientemente, el torero Sebastián Castella había de salir en defensa de éste a través de una carta al director enviada al diario El Mundo.
Llegados a este punto en Andújar se han suspendido dos corridas de toros, previstas para los días 5 y 6 de septiembre. Así lo ha informado el Ayuntamiento de la localidad jiennense, por medio de un comunicado en el que se alegan motivos de diversa índole, entre los que destaca el incumplimiento de diversos trámites administrativos.
Tiempos difíciles, en definitiva, para dos mundos colindantes que parecen llevar ligado su destino.
