Blas J. Muñoz. Un buen número de las cofradías cordobesas se halla envuelto estos días en los preparativos de la Feria de Nuestra Señora de la Salud. Un evento que, por cíclico, no deja de poner sobre la mesa el relevante papel que ocupan las hermandades en prácticamente cualquier celebración realizada a esta orilla del Guadalquivir y como, a través de las mismas, puede tomarse el pulso de su actividad.
Una de las hermandades que vive con mayor intensidad la Feria de Córdoba es la Hermandad de la Estrella cuya presencia en al recinto ferial se ha convertido con el paso de los años en un pilar fundamental y su caseta en una de las destinos ineludibles para cualquier cofrade que cambia en Mayo las cornetas y los tambores por el compás por sevillanas.
Este año, la Estrella inicia un proceso de renovación exterior de su caseta, con el nuevo aspecto que lucirá la portada de la caseta que da a la calle Corredera, así como una nueva "pañoleta", de estilo regionalista, bajo diseño de D. Miguel Ortiz Cabello, hermano de la corporación de la Huerta de la Reina, estando prevista la finalización de la renovación exterior en el lateral del Paseo de Caballos para el próximo año.
Corpus
Aun con los ecos de la celebración del Arenal, la corporación de la Huerta de la Reina dará cumplida cuenta de la celebración del Corpus Christi. Una festividad que tendrá su punto álgido en la procesión que se desarrollará por las calles de la feligresía de San Fernando el próximo cinco de junio con los pasos del Dulce Nombre de Jesús que este año dirige, como capataz, Alejandro Muñoz.
Por su parte, el paso que portará al Santísimo Sacramento estará dirigido por Rafael Giraldo, capataz titular de Nuestra Señora de la Estrella. Y que, en fechas recientes, publicaba un emotivo artículo en Gente de Paz, donde explicaba sus sensaciones ante este hecho. Todo ello en un ámbito celebrativo que no hace sino mostrar la ingente actividad de una corporación que mira al futuro sobre la base de un consolidado presente.