Blas J. Muñoz. Las cofradías están en alza y así lo viene demostrando el
nivel de respaldo popular que, cada una en su medida, vienen recibiendo
durante los últimos años, donde el número de personas que van a
acompañarlas por las calles de Córdoba, no ha hecho sino ir en un
aumento progresivo, en líneas generales. Baste recordar en este sentido
la multitudinaria acogida que han recibido las hermandades que en estos
últimos tiempos, han realizado salidas de carácter extraordinario.
Las
Octavas del Corpus que las diferentes corporaciones cordobesas
realizaban el pasado fin de semana nos ofracían otra oportunidad para
corroborar este aspecto, todo ello sin olvidar que hay hermandades que
-por mérito propio- se han ganado un espacio privilegiado dentro de la
devoción popular. Este es el caso de la Hermandad de la Presentación al
Pueblo.
La corporación de San Vicente Ferrer
volvía a dejar constancia del arrago que comienza a asentar en el barrio
de Cañero el pasado 5 de junio por medio de la celebración de su
"Corpus Chico", donde fieles y devotos no perdieron la oportunidad de
acudir a una nueva cita de la Hermandad, la cual no hace sino conseguir,
acto tras acto, dejar una clara constatación de lo que para Cañero supone
tener una cofradía.
El Sábado de Pasión, con
motivo de la primera salida procesional del Señor de los Afligidos, la
explosión popular que se vivió en Cañero fue como pocas. De hecho, el
Director de la Agrupación Musical Nuestro Pdre Jesús de la Fe en su
Sagrada Cena, Rafael Palos, lo recordaba en unas recientes declaraciones
concedidas a Gente de Paz, donde ponía en valor la impresionante
cantidad de personas que abarrotaban la plaza para la salida del Titular
que gubiara Martín Nieto.
