Sencillamente espectacular, sin paliativos de ningún tipo, el magnífico reportaje realizado por nuestro compañero Antonio Poyato del Tradicional Besamanos que en honor de Nuestra Señora de la Paz y Esperanza se celebra cada Viernes de Dolores en su casa capuchina.
La Señora esperaba pacientemente casi en el umbral de la Iglesia Conventual del Santo Ángel la llegada de miles de personas que se acercaron a besar su mano como marca una de las tradiciones más arraigadas de la Córdoba Cofrade. Sin lugar a dudas una de las escenas que, de manera inequívoca, marcan el inicio de la Semana más hermosa.
Guillermo Rodríguez