Ángel Martínez Presidente de la Hermandad de Cofradías de
Palencia
El dirigente considera que este año se ha dado un salto
importante que ha permitido a la Semana Santa ganar en puntualidad y
uniformidad
Ángel Martínez, presidente de la Hermandad de Cofradías de
Palencia, se mostraba satisfecho del desarrollo de la Semana Santa que acabamos
de terminar, aunque le ha quedado la espinita de no haber podido celebrar las
dos últimas procesiones del ciclo, la de la Soledad de la Virgen y la del
Rompimiento del Velo, que tuvieron que suspenderse por la lluvia.
-Es el segundo año que la Semana Santa de Palencia es de
interés turístico internacional y el segundo año también que el tiempo no deja
salir todas las procesiones...
Aunque se haya complicado el final de la semana, creo que
ha estado bastante bien. Hemos sacado la mayoría de las procesiones a la calle,
con muy buena asistencia de público y de cofrades. Estoy satisfecho, pero la
pena es que no hayamos podido rematar, ya que, por ejemplo, la procesión del
Sábado Santo es muy importante dentro de la Semana Santa palentina, además, en
mi cofradía, la del Santo Sepulcro, teníamos previsto sacar este año a nuestra
Virgen de los Siete Dolores a hombros, hubiera sido un puntito más para mejorar
la procesión. Ha sido una Semana Santa para que todos los cofrades se sientan
satisfechos del éxito que ha tenido y, por ende, los palentinos también.
-¿En qué medida ha engrandecido la declaración de interés
turístico internacional a la Semana Santa de Palencia?
Ha puesto un punto y seguido a nuestra Semana Santa, en el
sentido de que se han reconocido nuestras tradiciones y se ha puesto una
impronta a nivel nacional, y eso tiene dos vertientes: por un lado, que a las
propias cofradías nos hace ser más exigentes e intentar no conformarnos con lo
conseguido, sino mejorar en todo lo que se pueda; y por otro lado, supone
entrar en los circuitos de promoción turística que han utilizado el
Ayuntamiento, la Diputación y la Junta de Castilla y León, lo que se ha
reflejado en que esta semana la ciudad ha estado llena, tanto de personas de
otras provincias como de palentinos en la diáspora que han querido redescubrir
nuestra Semana Santa. Ha habido muchísimos turistas, me atrevería a decir que
se han multiplicado por diez . Las cofradías damos una herramienta a las
administraciones y ellas la utilizan, creando así una sinergia que permite
atraer turistas durante esta semana que a veces vuelven después, lo que también
repercute en la economía.
-¿Cree que ahora es más fácil conseguir la declaración de
interés turístico internacional que hace años? El alcalde de Valladolid,
Francisco Javier León de la Riva, dijo el pasado año que «proliferan o se
regalan»...
Nosotros tenemos argumentos para rebatir lo que dice el
alcalde de Valladolid. El Museo Nacional de Escultura tiene muchos pasos que él
saca a la calle, nosotros tenemos muchos pasos que son nuestros y además
contamos con otros momentos especiales, no se trata solo de ver un museo en la
calle. La Semana Santa palentina ofrece momentos de recogimiento, de gran
fervor... No es solo arte, también son otras cosas. Si las semanas santas que
tienen la declaración de interés turístico internacional cumplían los requisitos
establecidos por la normativa, entonces nada hay que decir.
-¿Qué balance realiza de la Semana Santa que acaba de
terminar?
-Me voy a quedar con lo positivo, aunque hemos cometido
algunos errores y hay asuntos que hay que seguir mejorando. He vivido una de
las semanas santas más intensas y perfectas de mi vida, y soy cofrade desde los
15 años. Estoy muy satisfecho y creo que el resto de cofradías también se debe
sentir así por el trabajo que hemos hecho.
-¿Cuáles han sido sus puntos fuertes?
Hemos ganado mucho en puntualidad, en uniformidad, en
organización y en ser respetuosos con los que nos están viendo. Quizá en los
programas debemos explicar un poco mejor que cuando decimos que llegamos a las
22:00 horas no significa que acabe la procesión a esa hora, sino que empezamos
a llegar. Soy consciente también de que muchos turistas han agradecido que
demos esa información, porque así podían dedicarse a ver otras cosas e ir a la
procesión en el momento que querían. Creo que este año hemos dado un salto
importante.
-Los horarios se han cumplido bien en las procesiones
pequeñas, pero en las grandes parece que cuesta un poco más...
Cuando llevas pasos a hombros y no sabes el número de
hermanos que van a ir es difícil atinar. Pero aún así, salvo excepciones, estoy
muy contento, aunque tenemos que seguir mejorando. Hay que buscar los medios
para cumplir con los horarios. Es un trabajo que antes no hacíamos y que no se
puede hacer de la noche a la mañana.
-¿Y en qué aspectos hay que seguir trabajando?
Es un asunto de las juntas de gobierno y de los equipos de
dirección de las cofradías. Antes se podía hacer entre cuatro o cinco personas,
pero con el volumen que ha adquirido, es imposible. Estamos todo el año
trabajando en la Semana Santa, no se trata solo de montar los pasos para las
procesiones, hay que organizar muchas cosas, es un trabajo intenso. Estoy muy
satisfecho del nivel en el que estamos, pero debemos seguir mejorando. Cuando
pasemos la crisis económica y tengamos más recursos, también tendremos que
mejorar en otros aspectos, como los ornamentos estéticos.
-Una de las novedades de este año fue el traslado del
Prendimiento de la catedral a San Miguel. ¿Cómo le parece que quedó?
A mí me gustó el marco, pero quizá se nos quedó pequeño
porque no éramos conscientes de la repercusión que iba a tener, aunque eso lo
tendrá que valorar la cofradía que lo organiza.
-Este año se ha introducido una nueva procesión, la de la
Sentencia, el Viernes de Dolores. ¿Es positivo organizar nuevos desfiles o es
mejor consolidar los existentes para no saturar el programa?
Que salga una procesión nueva es una cuestión espontánea de
una cofradía que luego autoriza el obispo. Algunas no se han inventado, sino
que son fruto de la tradición, y otras se organizan por dar un contenido a una
cofradía o a un determinado día. Personalmente creo que con las que tenemos son
suficientes, pero eso no quiere decir nada para que mañana alguien quiera
organizar otra procesión.
-Porque a más procesiones, menos cofrades en cada una de
ellas...
Salvo pequeñas excepciones de cofrades que salen en todas,
lo habitual es que elijan algunas para salir. Quizá desde la Hermandad debamos
ponernos de acuerdo en el número de cofrades mínimos para que la representación
quede digna.
-¿Tienen las cofradías un buen número de hermanos?
Se mantiene el número, no hay un incremento exponencial
como ocurrió en los años setenta. Lo que es destacable es que hay ahora mucha
gente joven, por lo que está asegurado el relevo generacional.
-Un grupo de peruanos creó el pasado año la Hermandad del
Cristo de los Milagros, que parece que ha mostrado su interés por salir en
Semana Santa el próximo año. Este año en Vigo ya han procesionado. ¿Qué le
parecería que se diera esta situación en Palencia?
Sé que están en un proceso de aprobación de los estatutos
para constituirse en cofradía y después, si quieren pertenecer a la hermandad y
tienen sus estatutos aprobados por la Diócesis, les acogeremos.
-Un apoyo importante para la Semana Santa es el punto de
información instalado en Ignacio Martínez de Azcoitia, criticado por algunos
porque creen que rompe la estética de la calle, afectando a la capilla de La
Soledad y al Colegio de Villandrando. ¿Barajan otra ubicación o esta es
adecuada?
Antes lo teníamos en el Patio de Castaño, pero tuvimos que
cambiar de sitio porque no era adecuado según los Bomberos. La ubicación no es
inamovible, pero hay que buscar un sitio que sea de paso, céntrico... Yo estoy
abierto a cualquier sugerencia y también a que me pongan otro punto de
información más grande y más bonito.
-Y para contar todo al detalle ha estado el Cimbalillo
Cofrade, que este año ha retransmitido por primera vez en FM...
Ha influenciado mucho en difundir entre los propios
palentinos nuestra Semana Santa, ha sido una idea muy buena. Además, estoy muy
agradecido al equipo que lo ha hecho posible, porque requiere de mucho trabajo
y esfuerzo, así que estoy muy satisfecho.
-Uno de los últimos logros de la Hermandad de Cofradías ha
sido la nueva sede en la Sacramental de San Miguel. ¿Se la va a dotar de
contenido?
Será el lugar de referencia para los cofradías, va a dar a
la hermandad una nueva categoría. Queremos que allí se desarrolle un centro de
interpretación del que ya tenemos el borrador del convenio. Este centro gozará
de una exposición permanente y de un aula didáctica que esperemos que se pueda
abrir antes de la próxima Semana Santa.
-¿Renuncian definitivamente al proyecto del museo?
Creo que ahora no es momento de obras faraónicas, aunque
ojalá algún día lo podamos tener.