La venerada imagen de María Santísima del Dulce Nombre es una de las dolorosas más bellas ejecutadas del pasado siglo XX de la Semana Santa de Sevilla. El insigne imaginero Antonio Castillo Lastrucci fue su autor en el año 1924 por
la que cobro 3000 pesetas de la época. Realizada en madera de pino
Flandes, es una talla policromada y de candelero para vestir. Mide 1,73
metros de altura.
La vida de esta
imagen tiene momentos históricos vividos junto a los hermanos de su
cofradía y el mundo cofrade en general. Hemos seleccionados seis de esos singulares instantes. El primero de ellos refleja la dolorosa de Castillo, bajo palio, saliendo desde el templo de San Román. Fue el Martes Santo del año 1924.
La dolorosa va acompañada por la imagen de San Juan Evangelista. Se da
la circunstancia que la Virgen del Dulce Nombre siempre ha salida bajo
palio acompañada del “discípulo amado” incluso en las saludas
extraordinarias. Esta imagen sustituyó a primitiva titular de autoría desconocida realizada en el siglo XVII, que en la actualidad se le rinde culto en el Beaterio de la Trinidad.
Este primer plano de la corresponde al año 1927. Es
esta dolorosa la primera y más característica de las dolorosas de tipo
“castizo sevillana”, de las labradas y creadas por el escultor sevillano Antonio Castillo Lastrucci.
Fue restaurada por su propio autor en los años 1927 y 1941, y por el taller de Isbilia en el año 1991.
En esta fotografía se puede admirar la corona de salida, que fue realizada un año antes, en 1926, por Joyería Dalmás, bajo diseño de Antonio Amians y realizada en plata de ley y dorada en oro fino. Fue restaurada por el orfebre Fernando Marmolejo en 1998.
En los años 20 del siglo pasado tres genios de la Semana Santa de Sevilla como son Juan Manuel Rodríguez Ojeda, Manuel López Farfán y Antonio Castillo Lastrucci trabajaron para esta hermandad.
En esta instantánea se encuentra María Santísima del Dulce Nombre, bajo palio, en el interior de la iglesia conventual de San Antonio de Padua.
Es una fotografía que se data entre los años 1936 y 1940,
ya que el paso tiene los antiguos respiraderos realizados por Antonio
Castillo Lastrucci, que la hermandad los vendió a una cofradía de la
localidad onubense de Ayamonte. Sus cartelas las recuperó recientemente la hermandad de la “Bofetá”.
Los actuales respiraderos se estrenaron en el año 1941, siendo elaborados por Contreras.
Los bordados del paso de palio fueron realizados por el insigne Juan Manuel Rodríguez Ojeda. El palio en el año 1921 y el manto se estrenó dos años más tarde, en 1923.
Esta fotografía seleccionada, datada en el año 1957, corresponde a una imagen del besamanos en honor a la Virgen del Dulce Nombre en el templo de San Antonio de Padua.
La hermandad de la “Bofetá” tuvo su sede canónica en esta iglesia conventual desde el año 1924 hasta el 1968.
Se
puede admirar, además de la dolorosa y el montaje realizado por los
priostes de esta cofradía del Martes Santo, al resto de titulares: el Santísimo Cristo del Mayor Dolor, San Juan Evangelista y Nuestro Padre Jesús ante Anás.
En
el mes de septiembre esta hermandad siempre celebró besamanos y triduo
en honor de su dolorosa y en los últimos años un rosario de la aurora
visitando su feligresía.
La Virgen del Dulce Nombre participó en el siglo XX en dos muestras marianas de carácter extraordinario celebradas en la ciudad al amparo de las exposiciones Iberoamericana de 1929 y la Universal del año 1992.
En
esta imagen se puede contemplar el paso de palio presidido por María
Santísima del Dulce Nombre en el año 1992 en el interior de la iglesia
colegial del Divino Salvador, donde se trasladó para este importante
evento denominado genéricamente “Esplendores de Sevilla”, que tuvo una amplia repercusión en Sevilla.
En esta muestra participaron otra serie de hermandades hispalenses.
En el año 1997 la imagen se trasladó al convento de las Mercedarias
por obras en su sede canónica, la Parroquia de San Lorenzo Mártir. En
la fotografía se puede contemplar el besamanos instalado en el mes de
septiembre.
Esta hermandad no abandonó su feligresía
por el apego a su barrio, incluso en ocasiones extraordinarias como fue
las obras de reformas llevadas a cabo en su templo.
Las hermanas Mercedarias de la Asunción y las Trinitarias de Madre Isabel son camareras honorarias de
la Virgen del Dulce Nombre desde el año 1997. Esta imagen desde que la
realizara Castillo Lastrucci ha recibido culto de forma ordinaria en los
templos de San Román, San Antonio de Padua y San Lorenzo.
