Blas Jesús Muñoz. Hace pocas semanas fui a ver el Vía Crucis de las cofradías y me topé con la bella imagen, serena, del Nazareno del Alcázar Viejo. Ya se opinó sobre el tema de la idoneidad o el criterio a seguir cuando ostentas un cargo y eliges al titular de tu cofradía por encima de otras Imágenes que, probablemente, tenían argumentos para haber sido escogidas. Mas, al fin y al cabo, al escoger uno decide y desecha a la vez.
Hasta ahí todo opinable, más o menos normal, dentro del sentido común genérico que podemos encontrar en las cofradías. Cuál no sería mi sorpresa cuando, en un cartel que publicita la compra de abonos adivino la silueta de una Imagen, ¿adivinan de cuál se trata?
El cartel lo edita la Agrupación de Cofradías, su Presidente es hermano de Pasión y su Titular de nuevo presidiendo. Se ve que el famoso criterio de por "tocas", toca de año en año y éste es el del Nazareno de San Basilio. Éso o que, directamente, el nuevo método consiste en que quien ostente ese cargo "coloca" su devoción por delante de la obligación equitativa.
Sin embargo, la reflexión va más allá. Un cartel para vender abonos hace suponer que aquellos tiempos en que había lista de espera pasaron y la cosa anda cada vez más cortita. Si no poca o nula falta haría publicitarlo con el desembolso económico que supone, ¿no creen?
Sea como fuere, ya empieza a dar miedo pensar en el cartel de las Glorias...
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