Blas Jesús Muñoz. La tarde comenzó en san Cayetano con himnos a la Virgen del Carmen y con la ciudad repleta de luz y calor para recibir a las 25 Vírgenes coronadas de la diócesis. El día era histórico y, durante un buen puñado de horas, todo han sido vivas y salves para encumbrar una jornada que ha venido a demostrar el arraigo, la cultura y tradición católica de la ciudad.
Destacó con luz propia el caminar de los costaleros que portaron a la Fuensanta hasta el primer templo de la diócesis. Tal vez, el único pero sea que no salió de su Santuario y, aunque se gane en dos traslados, su barrio perdió la oportunidad de observar con naturalidad a la Patrona de la ciudad.
San Asciclo y santa Victoria flanquearon a Nuestra Señora del Socorro, en una afortunada estampa que, esperemos no tarde en repetirse. Si bien, muchas otras serán difícilmente reproducibles como el caminar por la calle de la Feria de la Purísima de Puente Genil. Una bella Imagen y un encuadre perfecto para quienes hemos tenido la oportunidad de disfrutarlo.
Han sido muchas las devociones concitadas en esta calurosa jornada de verano en Córdoba. Muchos los sentimientos, mucho el asombro que la sacralidad despierta en el que observa a pie de calle sin más pretensión que la de ser partícipes de un momento histórico, en el que la ciudad de Córdoba se rindió a los pies de la Virgen.
Recordatorio El cáliz de Claudio: Los cobardes de la Magna