Blas Jesús Muñoz. ¿Se imaginan un paso sin flor? Los hay, pero por regla general la mayor parte de andas, tronos y parihuelas encuentran en el entorno floral una parte imprescindible para acercarnos a lo sagrado a través de los sentidos.
Así se ha entendido desde siempre y, de esa manera -en una conjunción indisoluble entre estética, sentidos y sacralidad-, parte la labor de Pinsapo Flores a la hora de exornar los pasos. Se trata de un proyecto joven, basado en unos sólidos cimientos que parten del concepto clásico para introducir un aire renovado en la forma de entender la totalidad de los altares efímeros que son los pasos procesionales.
El de la Custodia de la Trinidad ha sido uno de los últimos trabajos de Pinsapo. Hace unos días, cuando anunciábamos la procesión eucarística, les proponíamos como cabecera una fotografía de la referida Custodia sin mayor adorno. En las imágenes que hoy les mostramos la dimensión de la misma con el entorno enseñoreando a Jesús Sacramentado.
Las cofradías se nutren de pequeños detalles que las hacen distintas a cualquier otra expresión artística. La flor, efímera como la primavera de la vida, da cuenta de uno de esos detalles y, en Pinsapo, han heredado parte de esa tradición, de esa primavera eterna que siempre nos lega la piedad popular.
Recordatorio Domingo de Corpus en la Trinidad