Juan Pérez. Decía José Luís Cabello, candidato a hermano mayor en las inminentes elecciones de la Hermandad de Pasíón, en una entrevista reciente concedida al peridodista Esteban Romera, al ser preguntado acerca de si era bueno para su hermandad la concurrencia de dos listas para presidirla que "siempre sería mejor que hubiera una sola; pero tampoco es trágico que haya dos, si se respeta un código, más que ético (que también), fundamentalmente cristiano, donde no quepan las descalificaciones a las personas ni, mucho menos, la ausencia de caridad fraterna en las opiniones sobre los oponentes".
La realidad es que cuando en un proceso electoral de estas características únicamente se presenta una candidatura puede ocurrir que se haya alcanzado el nivel de consenso preciso para que diferentes sensibilidades confluyan bajo un mismo proyecto, pero también puede obedecer a que sea el hastío experimentado en buena parte de la masa social lo que determine la ausencia de rival para una candidatura oficialista.
La realidad es que cuando en un proceso electoral de estas características únicamente se presenta una candidatura puede ocurrir que se haya alcanzado el nivel de consenso preciso para que diferentes sensibilidades confluyan bajo un mismo proyecto, pero también puede obedecer a que sea el hastío experimentado en buena parte de la masa social lo que determine la ausencia de rival para una candidatura oficialista.
La Hermandad de la Hiniesta es una de estas cofradías que ha evitado la concurrencia de dos listas para presidirla, minimizando el riesgo de un potencial enfrentamiento público que rara vez se derivan consecuencias positivas para la imagen y la salud de una corporación y que ya ha comenzado a arrojar declaraciones altisonantes en otra de las hermandades que estos días se halla inmersa en un proceso electoral, la Hermandad de Pasión.
En la Hiniesta en cambio, cerrado el plazo de presentación de candidaturas a las elecciones del próximo 12 de Junio, la única candidatura presentada, a la espera de su aprobación por la Autoridad Eclesiástica, ha sido la liderada por el actual Hermano Mayor José Antonio Romero Pérez, que resultó elegido hermano mayor de la Hermandad de la Hiniesta en junio de 2012, en unas elecciones que ganó con un amplio margen tras la participación en las mismas del 25% de hermanos con derecho a voto, un porcentaje amplísimo, considerando la enorme abstención que se produce habitualmente en este tipo de convocatorias.
Romero Pérez, bajo cuyo mandato la corporación de San Julián afrontó la importante restauración de sus Sagradas Imágenes a manos del prestigioso restaurador Pedro Manzano Beltrán y celebró su 450 aniversario fundacional, que culminó con la salida procesional de su dolorosa el pasado 24 de octubre, aspira a revalidar su cargo "atendiendo a la solicitud de numerosos hermanos" y con la ilusión de culminar el proyecto iniciado en su primer mandato tras una larga experiencia dentro de la hermandad, fundamentalmente vinculado al área social y asistencial, ámbito en el que centrado el desarrollo de estos cuatro años de gobierno y que parece haber logrado el beneplácito de sus hermanos, habida cuenta de la ausencia de candidato alternativo.