R. Rodríguez. San Cayetano descuenta las jornadas para volver a presenciar la salida procesional de Nuestra Señora del Carmen Coronada, una cita que tendrá lugar el próximo 16 de julio y que supondrá la culminación de un intenso programa de cultos que se desarrollará a lo largo de todo un mes dedicado a esta devoción ancestral.
Un rosario cultual que se iniciará el próximo jueves y culminará el 15 del mes, justo en la antesala de la puesta de largo de una de las citas más esperadas del ciclo de glorias en la ciudad de San Rafael. Una jornada en la que la ciudad se detendrá literalmente para cubijar bajo su cielo a una de las joyas perennes que atesora su devocionario.
Como preámbulo de lo que ha de acontecer, en la noche de este sábado, inmediatamente después de la sabatina celebrada en honor de la Reina del Carmelo, ha tenido lugar la presentación del cartel que anuncia la procesión de este verano, ilustrado por una fotografía obra de Miguel Arroyo García, hermano de la corporación lefítica, que muestra a la Emperatriz Cordobesa y a su Bendito Hijo, el Divino Salvador, como únicos ejes de la escena.
Un cartel que sirve para anunciar una salida procesional en que la Virgen volverá a estar acompañada por la prestigiosa Sociedad Filarmónica del Carmen de Salteras por un itinerario que se desarrollará por las calles Cuesta de San Cayetano, Ollerías, Torre de la Malmuerta, Jardines de Colón, Torres Cabrera, Plaza de Capuchinos, Cuesta del Bailío, Alfaros, Conde de Priego, Mayor de Santa Marina y Cuesta de San Cayetano por el que el navío de la Patrona de los marineros volverá a ser gobernado por la experta mano del capataz Rafael Muñoz Cruz ante la atenta mirada de toda Córdoba.
Un cartel que sirve para anunciar una salida procesional en que la Virgen volverá a estar acompañada por la prestigiosa Sociedad Filarmónica del Carmen de Salteras por un itinerario que se desarrollará por las calles Cuesta de San Cayetano, Ollerías, Torre de la Malmuerta, Jardines de Colón, Torres Cabrera, Plaza de Capuchinos, Cuesta del Bailío, Alfaros, Conde de Priego, Mayor de Santa Marina y Cuesta de San Cayetano por el que el navío de la Patrona de los marineros volverá a ser gobernado por la experta mano del capataz Rafael Muñoz Cruz ante la atenta mirada de toda Córdoba.