Antonio Rendón Domínguez. El
22 de agosto, último día de la Octava a la Patrona de Sevilla y su Archidiócesis, la Virgen de los Reyes, tuvo lugar la apertura de la urna
del Rey San Fernando patrón de la ciudad hispalense.
Cuatro
años después de la toma de la ciudad, el Rey Fernando murió en el
primitivo alcázar y dejó un testamento que recogía su voluntad de yacer a
los pies de la talla mariana. Este deseo se cumplió y en la actualidad,
el Santo Rey y la Patrona, siguen estando cerca desde hace más de siete
siglos. Sin embargo, no es hasta a finales de agosto cuando esta
cercanía se hace patente de forma más precisa.
Este
día es el tercero del año en que esto ocurre, después del 14 de mayo,
día en que en 1729 se produjo el traslado de los resto momificados del
conquistador de Sevilla, el Rey Santo ya canonizado, a la urna de plata
que cinceló Juan Laureano de Pina en el siglo XVIII y el 30 de mayo, día
de su festividad. Aún quedará una cuarta jornada como es la del 23 de
noviembre, aniversario de la reconquista de Sevilla.
San
Fernando ha estado escoltado por miembro del Arma de Ingenieros del
Ejército de Tierra, tras la celebración de la Eucaristía. Delante de la
urna se contemplaba dos grandes centros de claveles.
Fotos Antonio Rendón Domínguez
Fotos Antonio Rendón Domínguez