José Barea. Las Hermandades a lo largo y ancho de nuestra querida geografía demuestran su solidaridad y generosidad durante los 365 días del año, pero es cierto que la llegada del mes de diciembre, y la cercanía de la Navidad, despierta en todos nosotros una especialidad sensibilidad hacia aquellos que, por causas del destino, sufren de infortunio en la vida que les ha tocado vivir.
Particularmente doloroso resulta cuando uno observa imágenes de niños en hospitales, sin poder disfrutar plenamente de la familiaridad de estas fiestas ni de los regalos navideños. Sin que se les permita ser niños, en definitiva. Antonio Afán es un ángel de ocho años que pertenece al Fútbol Club Deportivo Alcázar, del barrio del Alcázar Viejo, que sufre una enfermedad complicada cuyo único tratamiento posible se encuentra en Barcelona. Todos los colectivos del barrio, desde el equipo de fútbol hasta la popular Hermandad de Pasión, pasando por asociaciones vecinales, el Grupo Rosales, la Taberna Casa El Viejo o el Mesón San Basilio, así como la Fundación La Caixa y diversos donativos que no han parado de llegar, se han volcado con el pequeño Antonio de cara a ofrecerle unas condiciones de vida dignas y ayudarle a recibir ese tratamiento que tanto necesita.
Además, la Cofradía de Pasión, que ya arrimó el hombro el pasado año para ayudar a la Fundación Bangassou, se encuentra planificando un concierto solidario en cuaresma que se celebrará en el Patio de la Asociación de Vecinos del Alcázar Viejo, cuyas bandas participantes están aún por confirmar. Parte de lo recaudado de este concierto se destinará a ayudar a Antonio. Ya se ha llevado a cabo un maratón de fútbol 7 en Vista Alegre con cinco equipos prebenjamines y benjamines, cuya entrada y barra se ha destinado íntegramente a esta causa.
Jesús siempre permanecía al lado de los débiles y los más necesitados. Nosotros, seguidores del Señor como miembros activos de la Iglesia, hemos de ser conscientes que, de entre todos los débiles y los necesitados, los más indefensos son, sin duda, los niños. Por ello, iniciativas como esta, apoyada por la Hermandad de Pasión, son una perfecta oportunidad para demostrar nuestro compromiso con los más desfavorecidos. Piense que se trata del pequeño Antonio, pero podría ser su sobrino, su primo, su nieto, su hijo...
Ha sido habilitado un número de cuenta para todo aquel que desee colaborar con esta noble causa, que es el siguiente:
ES69 2100 3949 4102 0005 7443
Fotografía Antonio Poyato