Ambas hermandades tenían preparadas, el sábado, las alfombras de color por las que discurriría el Santísimo, en la procesión del Corpus al día siguiente sin embargo, por la madrugada, fueron destruidas por jóvenes que no tienen educación, y que en una noche de juerga, destrozaron toda la ilusión de dos hermandades jerezanas.
Dichos actos de vandalismo callejero han quedado demostrados porque sus autores, en actitud chulesca, en mi opinión, han querido compartir su hazaña con todos sus amigos subiendo a las redes sociales sus fechorías.