Arranca la fiesta de los patios en Córdoba, STOP. La ciudad se pone hermosa cuajada de flores en sus rejas y ventanas, STOP. Claveles, lirios y gitanillas, entre otros, se derramarán por antiguos balcones de casas con sabor añejo, STOP.
Ante la llegada de los patios, nuestro glorioso ayuntamiento le ramonea una posible buena mañana de cruces a nuestras hermandades, que mayoritariamente callan, STOP. El argumento es contundente: imposible que coincidan las dos fiestas por unas míseras horas en el tiempo, STOP. Y claro, ¿quién paga el pato? ¡Pues la fiesta de la exaltación de la cruz! ¡Claro estaba!, STOP
Llega la explosión de la primavera a Córdoba y la ciudad se inundará de flores por dos semanas, STOP. Pero aquí todo sigue igual...
Marcos Fernán Caballero
Recordatorio Candelabro de cola: ¿Por qué seguir hacia delante?