Coronación o la consecuencia del esfuerzo permanente

Guillermo Rodríguez. Son el talento, la constancia y el esfuerzo permanente las premisas fundamentales en las que se basa el éxito de los proyectos colectivos. Esta es la verdad absoluta que interpretan de manera magistral buena parte de las formaciones musicales de todo nuestro universo cofrade. Por eso, la Banda de Cornetas y Tambores Coronación de Espinas, una de las que mayor calidad despliega en cada una de sus actuaciones, asume con naturalidad esta premisa y la pone en práctica en base al trabajo cotidiano que constituye la esencia de su incuestionable realidad.

Con la mirada y la ilusión puestas en el importante evento que tendrá lugar en la ciudad de Huelva el próximo mes de septiembre, en la trascendente salida extraordinaria de Nuestro Padre Jesús Rescatado del próximo 1 de octubre y en un curso que ya han dado por comenzado, como materialización de un futuro inmediato que no es más que la consecuencia de su impecable trayectoria, en plena efervescencia del verano de la ciudad de San Rafael, los componentes de la excelente banda mercedaria se dieron cita la pasada noche en torno a la música, entendida en su concepción más pura, de la mano de su asesor musical Vicente Moreno, para profundizar en la matización de un repertorio clásico, con un aroma genuino y original, demostrando una vez más que el secreto de la excelencia se halla en ese trabajo duro del que la formación hace gala con orgullo, para su propia satisfacción y la de toda la ciudad de Córdoba.

Hoy, Coronación de Espinas, con dos décadas de vida a sus espaldas, y una celebración de su vigésimo aniversario que deparará interesantes sorpresas, se ha convertido por derecho propio, en un icono de la música en la Córdoba Cofrade por obra y gracia de noches como la de ayer. Este es el poso nuclear de su presente y la fuente que ha de materializar su brillante futuro. Un futuro garantizado para satisfacción de todos.

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